Piden se confirme al jefe de Radio Martí
Lincoln Díaz-Balart e Ileana Ros-Lehtinen respaldan a Herminio
San Román,
que es de afiliación demócrata
PETER KATEL
El Nuevo Herald
Dos congresistas cubanoamericanos, uno de ellos republicano, quieren
que el
presidente George W. Bush confirme como director de radio y TV Martí
al
demócrata miamense que supervisó el traslado de las estaciones
de
Washington a Miami.
Herminio San Román está bajo severas críticas del
inspector general del
Departamento de Estado y de un miembro de la junta de asesores de la
estación. Pero sigue en su cargo y nadie de la nueva administración
le ha pedido
la renuncia.
``Todos los puntos de vista de todos los sectores en la comunidad cubana
exiliada, así como la oposición interna y la prensa independiente,
están
reflejados en Radio Martí. Eso es lo que ha hecho Herminio San
Román'', dijo el
congresista republicano Lincoln Díaz Balart.
La también republicana Ileana Ros-Lehtinen respalda a San Román,
según
Díaz-Balart, aunque no respondió una llamada de El Nuevo
Herald.
Robert Menéndez, de Nueva Jersey, colega demócrata de
Díaz-Balart, dijo que
las críticas hacia Radio y TV Martí tienen un móvil
político.
``La gente que se opone a nuestra política cubana piensa que
no debe haber
transmisiones hacia Cuba'' comentó. Sin embargo, uno de los
más persistentes
críticos de San Román es un republicano de Washington
amigo del difunto líder
de la Fundación Nacional Cubano Americana (FNCA), Jorge Mas
Canosa,
responsable en gran medida de la creación de la estación.
``Hay que despedir a San Román'', afirmó Christopher Coursen,
que se
comprometió a dejarle saber sus opiniones a los nuevos responsables
de la
política hacia Cuba, ellos mismos todavía sin nombrar.
``Desde su inicio hasta
ahora, Radio Martí ha perdido aproximadamente el 70 por ciento
de su
audiencia''.
Una auditoría de 1999 por el inspector general del Departamento
de Estado
señaló que la calidad de la programación de la
emisora había caído
verticalmente.
San Román, un abogado de zonificación y regulaciones ambientales
antes de
asumir la dirección de las estaciones, no tomó en cuenta
informes sobre una
disminución de la audiencia.
El bloqueo de las señales de Radio Martí por parte de
Cuba es muy fuerte ahora,
dijo. Y un aumento en la represión política pudiera estar
volviendo a los cubanos
más prudentes a la hora de sintonizar lo que el gobierno cubano
llama una
estación ``enemiga''.
Entrevistas con cubanos recién llegados sugieren que la estación
de radio tiene
una audiencia del 20 al 25 or ciento de la población en su zona
de cobertura, dijo
San Román. ``Durante la Serie Mundial, recibimos como 1,000
llamadas
procedentes de Cuba; eso me indicó que la gente escucha''.
En 1991 Coursen fue designado por George Bush, padre, miembro del Comité
de
asesores del presidente para Transmisiones a Cuba, y el término
debía
cumplirse en 1993.