Nydia Bauzá / Primera Hora
La jueza administradora del Centro Judicial de San Juan, Isabel Llompart, determinó hoy causa probable para arresto contra el empresario Raymond Molina por el incidente en el que le propinó un puñetazo en el rostro al ex gobernador Carlos Romero Barceló el pasado miércoles en un restaurante del Condado.
La jueza le asignó una fianza de $1,000, pero Molina saldría en libertad tras pagar apenas $150, por dispposición administrativa.
Los fiscales César Mercado y Phoebe Isales sometieron esta tarde el cargo de agresión agravada contra Molina en una vista a puerta cerrada en la Sala de Investigaciones del Centro Judicial de San Juan.
Los cargos se sometieron mediante tres declaraciones juradas, una de Romero Barceló y dos de testigos oculares que de inmediato no fueron identificados.
Molina estuvo presente en la vista con sus abogados, Francisco López Romo y Arturo Guzmán. Romero Barceló no está presente.
Se informó que ambas partes sometieron como prueba el vídeo del incidente tomado por las cámaras de seguridad del restaurante Pelayo, escenario de la trifulca.
La jueza Llompart no permitió la entrada de la prensa a la vista.
Molina fue hoy temprano al Centro Metropolitano de Radicación de Denuncias (CEMID) para asumir su responsabilidad ciudadana y se refirió a Romero Barceló como un “político añejado”.
“Él es un señor político añejado. Es parte de la historia política de Puerto Rico. Él debe dialogar sin tener que sulfurarse… no sé qué le está pasando a estas alturas de su vida que no tiene control de sus acciones”, manifestó el empresario al ser abordado por la prensa.
El presidente de Golden Mortgage Corp. dijo, además, que en la vida los hombres tiene que asumir responsabilidad por sus actos y que “yo estoy asumiendo la mía y el señor ex gobernador debe asumir la de él”.
Se sostuvo en que le propinó un golpe en defensa propia y que el vídeo del restaurante “habla por sí solo”. “Ahí está evidenciada la conducta mía y la del ex gobernador”.
Molina se reservó el derecho de radicarle una contraquerella al político, pero no lo descartó.
“No tengo nada en contra de este señor. No voy a radicar a pesar de que él fue el agresor”, sostuvo.
Molina arribó temprano al CEMID en San Juan, en compañía de sus abogados.
López Romo dijo entonces que cuentan con dos testigos de defensa “que están disponibles para corroborar que fue Romero quien inició la agresión”.
Romero Barceló no acudió al tribunal porque, según sus familiares, se encuentra en reposo por prescripción médica, pero la fiscalía utilizará una declaración jurada que le tomó al ex gobernador.
El delito de agresión grave de tercer grado contempla una pena que va desde tres años hasta ocho años de prisión. Según el nuevo código penal, para considerarse una agresión de este tipo, el perjudicado debe haber recibido daño grave, permanente o mutilación, y tratamiento a nivel de hospitalización.
Por otro lado, el delito sería de cuarto grado si la persona agredida requiere asistencia médica y tratamiento ambulatorio. En dicho caso, las penas van de seis meses y un día de cárcel hasta tres años de prisión.