Cancel Miranda insta a la lucha
Por Wanda Ivette Matías
Especial El Nuevo Día
Hormigueros - Filiberto Ojeda Ríos no ha muerto. Ahora sobrevive en los hombres y mujeres que sin importar el cansancio ni el sol se unieron para protestar por el “asesinato” de un compañero independentista.
Con ese mensaje el ex preso nacionalista Rafael Cancel Miranda le habló a las cientos de personas reunidas ayer en la finca donde vivió el líder del grupo Los Macheteros.
“Filiberto ahora está en el clandestinaje en cuanta montaña, cuanto valle, cuanto río hay en Puerto Rico”, manifestó.
En su mensaje, Cancel Miranda instó a los independentistas a que no malgasten el tiempo discutiendo entre ellos.
Sostuvo que con su muerte Ojeda Ríos le envió un mensaje de unidad a los independentistas.
“No importa en qué trinchera estamos, si estamos luchando por la patria somos uno… Él nos dio el ejemplo, no malgastemos nuestro tiempo…”, peleando los unos con los otros, expresó.
“El enemigo es ese que asesinó a Filiberto y él lo confrontó cara a cara”, destacó Cancel Mirada al instar a los asistentes a la marcha que no pierdan de vista ese mensaje. “Sino vamos a jugar el jueguito del enemigo de matarnos unos a los otros… Si vamos a matar, vamos a tirar a donde hay que tirar, no nos tiremos los unos a los otros”, afirmó.
Señaló, además, que “no estamos en luto” pues Ojeda Ríos “ha glorificado nuestra existencia”.
“Su sangre va a ser el abono del árbol de nuestra libertad”, añadió el ex preso político quien no leyó mensaje, sino que habló con notable emoción. Incluso retó al “imperialismo” a que “me baje esas rodillas” pues sostuvo que no tienen el poder para hacerlo.
“Filiberto ha ayudado a enaltecer con su sangre y su vida la memoria histórica de nuestro tiempo”, comentó. Añadió que cuando “esos yanquis” desaparezcan el nombre de Filiberto será recordado por generaciones.
“Cada uno de nosotros que luche dentro de su marco, cada uno dentro de su trinchera respetándonos unos a otros, no hay que andar en la misma cama ni en el mismo carro”, recomendó.
Agradeció al Ejército Popular Boricua que aseguró no está terminado, sino que aún existe.
Cancel Miranda se enteró de la muerte de Ojeda Ríos cuando estaba en Cuba, operándose los ojos, según dijo.
“Me dolió y tuve rabia, quise estrangular al imperio… pero luego sentí un regocijo en el alma porque Filiberto murió como vivió de pie y combatiendo”, indicó.
Criticó al Departamento de Justicia por no hacer nada mientras
el FBI “asesinaba un patriota nuestro”, violaba todas las leyes de “las
instituciones coloniales” y apagaba las luces en Hormigueros.