WILFREDO CANCIO ISLA
El Nuevo Herald

Los juicios por desacato contra cinco cercanos colaboradores del militante anticastrista Luis Posada Carriles fueron pospuestos nuevamente hasta finales de año, confirmaron fuentes judiciales.

Según documentos divulgados ayer por el tribunal federal de El Paso, Texas, el juez David Briones decidió prorrogar hasta el 29 de octubre, a las 9 a.m., el juicio contra los acusados Ernesto Abreu, de 44 años, Santiago Alvarez y Osvaldo Mitat, ambos de 65.

La noticia coincidió con la liberación de Mitat, quien salió el jueves de una prisión federal de Miami-Dade tras cumplir 22 meses de condena por una caso de posesión ilícita de armamentos y explosivos. Su compañero de causa, Alvarez, debe quedar en libertad a finales de año.

El tribunal de El Paso también postergó hasta el 13 de noviembre, a las 8:30 a.m., el juicio contra los exiliados cubanos José Hilario Pujol, de 76 años, y Rubén López Castro, de 67, quienes debían comparecer ante la jueza Kathleen Cardone a partir del 22 de agosto.

''La decisión fue motivada porque las partes manifestaron la necesidad de prórroga a fin de explorar una posible solución para todos los involucrados en el caso'', indicó el abogado Luis Fernández, que representa a Pujol.

La postergación de ambos procesos pudiera estar vinculada a la situación de Posada, quien está bajo investigación de un jurado de instrucción en Nueva Jersey por sus presuntos vínculos con atentados en instalaciones turísticas cubanas en 1997.

Ayer una fuente relacionada con la pesquisa de Nueva Jersey aseguró a El Nuevo Herald que ''la fiscalía tiene listo el caso'' para encausar a Posada, de 79 años, quien está en libertad en Miami desde el pasado 8 de mayo bajo un reglamento de supervisión.

''La investigación está concluida y existen presiones de Washington para que Posada acepte cierto grado de culpabilidad'', indicó la fuente bajo condición de anonimato.

El abogado de Posada, Arturo Hernández, no quiso ayer hacer comentarios sobre el asunto.

El gobierno también apeló el caso de inmigración de Posada ante la Corte del Quinto Circuito de Nueva Orleáns, cuya decisión tendría indiscutible impacto en los procesos judiciales contra los cinco exiliados cubanos.

Los abogados Fernández y Miguel del Aguila, que representan a Abreu, declinaron referirse a las posibles implicaciones de un fallo sobre Posada para sus respectivos clientes.

Los cinco activistas se negaron a testificar ante un jurado de instrucción sobre la entrada de Posada a Estados Unidos en marzo del 2005. Excepto Abreu, los cuatro restantes formaron parte de la tripulación del barco Santrina, que viajó a Isla Mujeres, México, en esa fecha.

Un informante del FBI que los acompañó, Gilberto Abascal, asegura que Posada fue traído ilegalmente en la embarcación desde México hasta Miami.

Posada sostiene que entró a Estados Unidos por la frontera mexicana, con la ayuda de un contrabandista. Sobre él pesa una orden final de deportación y una solicitud de extradición del gobierno de Venezuela para juzgarlo por el atentado contra un avión cubano con 73 pasajeros en 1976.