Abimael Guzmán se declara en huelga de hambre
TEOFILO CASO / AP
LIMA
El cabecilla de Sendero Luminoso, Abimael Guzmán, y su compañera Elena Iparraguirre, presos desde 1992 en una base naval, se encuentran en huelga de hambre desde el lunes demandando un juicio justo y la visita sin restricciones de abogado y familiares.
En solidaridad con la pareja también se declararon en huelga de hambre los cabecillas del Movimiento Revolucionario Túpac Amaru (MRTA) Peter Cárdenas y Miguel Rincón, recluidos en la misma base de la armada, en el puerto El Callao, al oeste de Lima, dijo ayer a la AP el abogado de Guzmán e Iparraguirre, Manuel Fajardo.
El abogado dijo que ``la huelga comenzó el lunes ... los huelguistas seguramente deben estar tomando líquidos, sobre todo agua''.
Autoridades de la base naval no formularon comentarios acerca de la huelga.
En cuanto a la salud de Guzmán, de 69 años, el abogado dijo que el líder del grupo maoísta ``estaba bien, el 22 de marzo de este año, la última fecha que me permitieron verlo''.
Fajardo dijo que Guzmán y su pareja iniciaron la huelga ``contra la legislación antiterrorista, el fuero (militar) antiterrorista y las draconianas penas establecidas; y por un justo y debido proceso con jueces naturales y según las normas del derecho penal y procesal común''.
Según Fajardo, los huelguistas rechazan el restablecimiento de locutorios en los penales del país y el respeto de los derechos de visita, de socialización y de defensa de los internos.
Fajardo dijo que los locutorios son instalaciones que solo permiten que el preso y un familiar o su abogado, se vean a través de ventanas de vidrio y conversen mediante un intercomunicador, con la consiguiente grabación en una cinta de audio de las conversaciones. El abogado indicó que los huelguistas ``demandan una solución política a los problemas derivados de la guerra interna: inocentes encarcelados, requisitoriados, desaparecidos, damnificados, exiliados, presos políticos y de guerra, y de quienes aun continúan en armas''.
Agregó que ``en cuanto a la solución política Guzmán plantea, en buen romance, la aplicación del artículo sexto del Protocolo Adicional de los Protocolos de Ginebra sobre conflictos. Esto significa que concluido un proceso de guerra interna, el Estado debe atender y dar una solución política integral que pueda incluir la más amplia amnistía posible''.
Fajardo manifestó que la pareja en huelga rechaza ``el hostigamiento y persecución de familiares y abogados de los detenidos, y reclama el reconocimiento de sus derechos de visitar, socorrer y apoyar a sus familiares recluidos en penales; y exigen garantías para los abogados a fin de puedan ejercer su derecho de defensa de sus patrocinados''.
El abogado dijo que si las demandas de Guzmán e Iparraguirre no son atendidas, recurrirá al grupo de trabajo sobre detenciones arbitrarias de las Naciones Unidas.
Guzmán fue capturado por la policía en Lima el 12 de septiembre de 1992.
Fue juzgado sumariamente por un tribunal militar secreto que lo encontró culpable del delito de traición a la patria y lo sindicó como autor intelectual de la muerte de 30,000 personas y de daños por $25,000 millones desde mayo de 1980, cuando Sendero Luminoso acometió en Ayacucho, al sudeste de Lima, lo que llamó su ''lucha armada''. Guzmán fue condenado a cadena perpetua.
El gobierno dispuso un nuevo proceso que comenzó en abril del 2003.