Torrijos ofrece cambiar Panamá
Agence France Presse
PANAMA
El opositor Martín Torrijos, hijo del general Omar Torrijos, el otrora ''hombre fuerte de Panamá'', se convirtió el pasado domingo en el presidente electo de este país y renovó las esperanzas de los tres millones de panameños de combatir la pobreza, el desempleo y la corrupción.
Ex empleado de Mc Donalds en Chicago, empresario, administrador de empresas y politólogo, Torrijos, de 40 años, ganó la presidencia con la emblemática figura de su padre como telón de fondo, un general que gobernó de facto entre 1968 y 1981, pero que recuperó la soberanía del canal interoceánico.
Echando mano a sus mejores recursos: su relativa juventud, un discurso claro y directo y una especial empatía con los jóvenes y mujeres y los sectores más pobres, Torrijos ganó por amplio margen la presidencia frente al candidato oficialista José Miguel Alemán y el ex presidente Guillermo Endara.
Nacido el 18 de julio de 1963, Torrijos realizó sus estudios primarios y secundarios en el colegio privado El Pedagógico de Panamá, la Academia Militar St. John de Wisconsin, Estados Unidos, y cursos en la Universidad de Texas A&M, donde se graduó en 1986 en Ciencias Políticas y en 1988 en Economía.
En 1992, dos años después de que Estados Unidos interviniera militarmente y derrocara al régimen del general Manuel Antonio Noriega, Torrijos regresó a Panamá para dirigir el frente nacional de la juventud del Partido Revolucionario Democrático (PRD, socialdemócrata) fundado por su padre, el cual a la postre se convertiría en la plataforma política para convertirse en el nuevo líder político nacional de Panamá.
Propietario de varias empresas de construcción y exportación, de las cuales se conocen pocos detalles, Torrijos fue entre 1994 y 1999 viceministro de Gobierno y Justicia, el único cargo que ha ocupado en el sector público.
Casado con la publicista Vivian Fernández y padre de tres hijos, Torrijos compitió por primera vez en 1999 por la presidencia de Panamá, ocasión en la que fue derrotado por la ahora presidenta saliente, Mireya Moscoso, afectado por el desgaste del gobierno del ex presidente Ernesto Pérez, también del PRD.
Con su denominado proyecto renovador ''Patria Nueva'', Torrijos revitalizó al PRD con figuras jóvenes, desplazando a la vieja guardia dirigente vinculada a Noriega, y se ganó el respaldo de un amplio sector popular, incluyendo a miles de jóvenes que el pasado domingo 2 de mayo votaron por primera vez.
Sin atacar a sus adversarios, ni responder a una campaña de desprestrigio que lo vinculó al narcotráfico, la guerrilla colombiana y operaciones bancarias en República Dominicana, Torrijos logró mantener, según los analistas, su imagen atrayente en un país donde los políticos son señalados por la corrupción y el clientelismo.