ADALID CABRERA LEMUZ / Associated Press
 BRASILIA

 En una verdadera guerra legal con la justicia y el gobierno brasileños, la cantante Gloria Trevi está inmersa en una carrera contra el tiempo para evitar su extradición a México donde le espera un proceso bajo los cargos de rapto, violación y corrupción de menores.

 La Trevi, de 31 años, está embarazada de siete meses en circunstancias aún no aclaradas. La Policía Federal sostuvo que la cantante se embarazó mediante una
 inseminación artificial artesanal en el interior de la cárcel de la Superintendencia de la Policía Federal de Brasil donde permaneció detenida 19 meses junto a su
 empresario Sergio Gustavo Andrade Sánchez y su colaboradora María Raquenel Portillo.

 El viernes fue internada de emergencia en un hospital de Brasilia debido a que sufrió una hemorragia vaginal y dolores en los ovarios. A las pocas horas fue dada de alta y trasladada nuevamente a la cárcel de la Papuda, donde se encuentra desde fines de septiembre.

 El abogado de la Trevi, Otavio Bezerra Neves, manifestó que el gobierno brasileño "debería conceder refugio político a los tres mexicanos porque su vida correría riesgo en su país si es que son extraditados''.

 Neves interpuso el viernes un pedido de hábeas corpus ante el Supremo Tribunal Federal (STF), la máxima instancia judicial del país, para lograr la concesión de la
 prisión domiciliaria de la cantante y de sus colaboradores.

 Dijo que Trevi debe someterse a un tratamiento médico para tener un alumbramiento en paz, lo que no puede hacer en el interior de la cárcel.

 La procuradora de Neves, Silvia Beeg, dijo que, además, Trevi, Andrade, Portillo y ella misma recibieron amenazas anónimas de muerte después de que la cantante
 informó a los magistrados del Poder Judicial que su embarazo es consecuencia de una violación en el interior de la cárcel de la Superintendencia de la Policía Federal.

 En un memorial al STF, la Trevi no especificó si las personas que la violaron fueron los presos o los policías del penal. Hasta el pasado miércoles, se había negado a
 informar las circunstancias de su embarazo "porque no quiero poner en riesgo mi vida en Brasil'', señaló.

 El magistrado del STF, José Neri da Silveira, negó esta semana dos veces el pedido de prisión domiciliaria, lo que obligó a la defensa entrar el viernes con un recurso de habeas corpus que será definido los próximos días.

 El abogado anotó que el STF debe analizar además otro recurso de nulidad al dictamen de extradición que emitió en diciembre pasado en contra de la Trevi, debido a que, en su opinión, tiene "vicios de nulidad''.

 La defensa de la cantante anotó: "México, al ser una República Federativa, tiene un orden institucional que hace que los pedidos de extradición sean presentados por la Fiscalía y no por el ejecutivo''.

 Señaló que en el caso de Trevi y sus colaboradores, la solicitud de extradición fue presentada por la embajadora de México en Brasil, Cecilia Soto, representante del gobierno, lo que invalidaría su procesamiento.

 Además de la decisión del STF, Trevi espera la determinación del Comité Nacional del Refugio (Conare) que debe emitir una recomendación al ejecutivo a su pedido de refugio para negarlo o aceptarlo.

 El Conare debía emitir una decisión el pasado lunes, pero no pudo hacerlo debido a que los abogados presentaron otro recurso que cuestionó la posición del presidente de ese organismo y ministro de Justicia, Aloysio Nunes Ferreira, por haber emitido criterios anticipados favorables a la extradición antes de que se produzca la reunión.

 Para superar todas las dudas sobre el embarazo de Trevi, Nunes Ferreira dispuso la creación de una comisión mixta de investigación, integrada por miembros de la
 Policía Federal, de la Orden de Abogados de Brasil y del Ministerio Público.

 Esa comisión tiene un término de 30 días para concluir las investigaciones y elaborar un informe tras convocar a declarar a todas las personas, sean presos, policías o la propia Trevi, con el fin de esclarecer el confuso asunto.

 Un reportaje de la revista Istoé colocó nuevas dudas sobre el embarazo de la cantante en base a cartas intercambiadas por algunos presos del penal donde estaba
 recluida que aseguraron que Trevi fue violada en varias ocasiones por los agentes penitenciarios, incluyendo a comisarios, y no por los detenidos.

 La comisión investigadora tiene prerrogativas para ordenar que Trevi y otras personas se sometan a pruebas genéticas para establecer quién es el padre del hijo que
 espera la cantante y que deberá nacer en enero como máximo, cuando Trevi cumpla dos años de detención en Brasil.

 La artista mexicana ya tuvo un hijo en Brasil, en 1999, cuyo padre era Andrade Sánchez. El niño murió en Río de Janeiro a menos de un mes de haber nacido en
 circunstancias no establecidas totalmente.

 Andrade es el principal origen de las acusaciones que penden sobre Trevi, una vez que los cargos de rapto, corrupción y violación de menores se basaron en una
 denuncia presentada por los padres de Karina Yapor, hoy con 19 años, que formaba parte del grupo artístico de Trevi desde los 12 años. Yapor tuvo un hijo de Andrade a los 15 años y denunció que le impidieron comunicarse con su familia.

 La ex esposa de Andrade, Aline Hernández, publicó un libro en 1998 en el que denunció que el grupo Trevi promovía la corrupción y la prostitución de menores.

 Andrade calificó esas acusaciones como provenientes del ``rencor de una persona que dejó de ser amada''.

 La Trevi ha manifestado a los periodistas en las pocas oportunidades que le permitieron hablar en Brasil que las acusaciones son falsas "porque forman parte de una conspiración para destruirme''.

 Subrayó que en México su vida corre peligro "debido a que existen intereses económicos, políticos y de algunos medios de comunicación que quieren mi desaparición''.