Reclaman por el trato recibido y exigen `el derecho a la libertad'

 WILFREDO CANCIO ISLA
 El Nuevo Herald

 Estancados en un limbo migratorio sin solución a la vista, el grupo de 25 cubanos que permanece retenido en la Base Naval de Guantánamo exigió ayer a las autoridades norteamericanas ``un tratamiento digno como refugiados políticos''.

 En una declaración leída desde la instalación militar, los detenidos manifestaron su disconformidad con ``las pésimas condiciones de vida y los actos de represión a que somos sometidos'' y solicitaron ``el derecho a la libertad''.

 Aunque los cubanos se encuentran alejados de las cárceles destinadas a los prisioneros del Talibán y la red terrorista Al Qaida, resulta creciente la preocupación por esta nueva convivencia dentro de la instalación militar.

 ``Lógicamente, estamos preocupados por la presencia de los terroristas aquí'', dijo Javier Pérez González, quien leyó la declaración en nombre del grupo, utilizando el teléfono de un empleado civil.

 Pérez, de 28 años, abandonó la isla en agosto del 2000 y fue interceptado por el Servicio Guardacostas a seis millas de Cayo Hueso. En 1991, cuando cumplía el
 servicio militar, trató de escapar en una balsa, pero fue capturado y condenado a dos años de prisión.

 Los otros 24 cubanos también fueron llevados a la Base de Guantánamo luego de ser interceptados por los Guardacostas cuando trataban de llegar ilegalmente a la
 Florida. En virtud de los acuerdos migratorios de 1994 y 1995, los cubanos capturados en altamar no son devueltos a Cuba si pueden de-mostrar que cumplen los
 requisitos de refugiados políticos.

 Pero para algunos de ellos, la espera en Guantánamo hasta que un tercer país acceda a recibirlos se ha prolongado ya por cuatro años. En el grupo hay una familia
 cuyos dos niños no están recibiendo instrucción escolar.

 En otras ocasiones, el Departamento de Estado ha conseguido reubicar a los refugiados en países como Uruguay y Bolivia. Semanas atrás, los cubanos recibieron
 información de que podrían ser enviados a Jamaica, pero el ofrecimiento no ha sido confirmado.

 Los congresistas cubanoamericanos Ileana Ros-Lehtinen y Lincoln Díaz-Balart han pedido que excepcionalmente se le permita al grupo ingresar en Estados Unidos.

 Al González, asesor de la Casa Blanca sobre asuntos jurídicos, declinó hacer comentarios sobre el tema.

 ``Ellos son los olvidados de Guantánamo'', comentó Ros-Lehtinen, quien la pasada semana visitó Guantánamo y se reunió con el grupo. La congresista escuchó sus
 reclamaciones y se las hizo llegar al comandante de la Base Naval.

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