Las FARC asesinan en la selva a dos estadounidenses
G.GUILLEN / El Nuevo Herald
BOGOTA
Dos estadounidenses no identificados que sobrevivieron al accidente
de un avión ''espía'' que ayer se precipitó a tierra
en el sur de Colombia fueron
asesinados presumiblemente por miembros de las Fuerzas Armadas
Revolucionarias de Colombia (FARC), reveló a El Nuevo Herald una
alta fuente militar.
Los cuerpos fueron encontrados, cerca a los restos del avión, con ''tiros de gracia'', explicó la fuente.
Otros dos estadounidenses y un oficial del Ejército de
Colombia que viajaban en la aeronave accidentada se encuentran desaparecidos
y se cree que
hayan sido secuestrados por los guerrilleros que asesinaron
a los otros dos, agregó la fuente.
Este crimen plantea ''una gravísima situación''
y anoche era analizado por la cúpula militar colombiana en una reunión
con el presidente, Alvaro Uribe Vélez,
anotó una fuente.
Los ministerios de Relaciones Exteriores y de Defensa Nacional
mantenían, al cierre de esta edición, conversaciones con
la embajadora de Estados Unidos
en Bogotá, Anne Patterson, para analizar la situación
planteada con el homicidio de los dos sobrevivientes.
Las fuerzas militares de Colombia hacían ayer ingentes
esfuerzos por tratar encontrar a los otros tres ocupantes de la avioneta
monomotor Cessna-208
Caravan que ''se estrelló cerca de Florencia [departamento
de Caquetá] cuando intentaba realizar un aterrizaje de emergencia
antes de las 9:00 de la
mañana'' de ayer, según un escueto comunicado
de la embajada estadounidense.
El comandante de las Fuerzas Militares de Colombia, general Jorge
Enrique Mora, atribuyó el accidente a ''fallas mecánicas
debidamente comprobadas,
descartando cualquier otro motivo'' y declaró que la
nave volaba en cumplimiento de ``una misión de inteligencia''.
Mora también precisó que ''a los 30 minutos de
haber ocurrido el accidente ya había aeronaves'' militares colombianas
sobrevolando la zona, situada a
unos 430 km al suroccidente de Bogotá.
Otras fuentes dijeron que, adicionalmente, fueron despachadas
unidades terrestres del Ejército que llegaron al sitio con el ánimo
de practicar el rescate de
los ocupantes y de los restos de la nave que se incendió
después de haber caído a tierra.
La zona donde cayó el avión estadounidense es dominada
por frentes de guerra de las FARC, que se instalaron en las selvas de la
región una vez
clausurada la zona de 42,000 km2 que el pasado gobierno de Andrés
Pastrana desmilitarizó para dejar en manos de esa agrupación
insurgente durante
más de tres años.
Caquetá es una de las regiones colombianas con mayor cantidad de cultivos de coca y laboratorios clandestinos para la fabricación de cocaína.
De matrícula colombiana HK 1166, la nave accidentada integra
los equipos de inteligencia electrónica que emplea EU en Colombia
para espiar al
narcotráfico en colaboración con las autoridades
locales.