Disidentes piden freno a la represión en Cuba
M ás de 70 miembros de las principales organizaciones opositoras firmaron el documento
WILFREDO CANCIO ISLA
El Nuevo Herald
En un abierto reto al régimen castrista, más de 70 reconocidos
disidentes
internos hicieron ayer un llamamiento a la comunidad internacional
``para que
contribuya a detener la ola represiva desatada por el gobierno de Cuba
desde
noviembre de 1999''.
En el texto, titulado ``Llamamiento desde La Habana'', representantes
de las
principales organizaciones opositoras dentro de Cuba advirtieron que
``durante el
año 2000 se registraron más de 1,000 actos de represión
política contra
pacíficos disidentes y por lo menos 18 de ellos permanecen en
prisión
provisional''.
``En el pasado mes de diciembre, la desproporcionada maquinaria represiva
del
gobierno de Cuba rompió todos los récords al registrarse
más de 300 acciones
de represión política, de las cuales por lo menos 270
fueron detenciones
arbitrarias de opositores no violentos'', indicó el documento.
Entre los firmantes de la coalición --autodenominada Todos Unidos--
figuran
Oswaldo Payá Sardiñas, líder del Movimiento Cristiano
Liberación; Elizardo
Sánchez, presidente de la Comisión Cubana de Derechos
Humanos y
Reconciliación Nacional (CCDHRN); Gustavo Arcos Bergnes, presidente
del
Comité Cubano Pro Derechos Humanos (CCDH); Héctor Palacios,
del Centro de
Estudios Sociales, y los periodistas independientes Raúl Rivero,
Víctor R.
Arroyo y Manuel Vázquez Portal, entre otros.
Varias llamadas de El Nuevo Herald para contactar a disidentes en La
Habana
resultaron ayer infructuosas.
La coalición ya había producido llamamientos similares
coincidiendo con la
celebración de la IX Cumbre Iberoamericana de La Habana, en
1999, y la X
Cumbre de Panamá, el pasado octubre, pero en esta ocasión
la iniciativa se
produce en un momento particularmente tenso en el acontecer sociopolítico
de
la isla.
Organizaciones de exiliados cubanos valoraron como un hecho significativo
la
aparición del llamamiento, a pesar de las sostenidas manifestaciones
de
represión interna de las últimas semanas y la crisis
desencadenada tras el
arresto de dos ciudadanos checos bajo acusaciones de ``actos subversivos''.
``El hecho de que dentro de esta campaña de terrorismo de Estado
se produzca
una respuesta de esta magnitud, prueba el vigor de la disidencia interna'',
opinó
Ricardo Bofill, representante del CCDH en Miami. ``Es un reto a la
represión y a
mantener inalterable el trabajo de la oposición pacífica''.
A comienzos de este año, la CCDHRN había difundido una
lista con más de 300
prisioneros, condenando la existencia de ``alrededor de 200 prisiones
y
campamentos de prisioneros en el Gulag cubano''.