Guerrilla de las FARC ataca campamento de paramilitares
Bogotá --(Reuters)-- Más de 30 personas murieron
cuando guerrilleros
atacaron el campamento de un escuadrón paramilitar ultraderechista
en el
noroeste de Colombia, informaron el jueves fuentes de ambas partes.
Los guerrilleros de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia
(FARC) dijeron en un comunicado que atacaron el miércoles
un bastión
de los paramilitares derechistas en la región bananera
de Urabá y
mataron a 32 integrantes del grupo mientras dormían.
Sin embargo, Carlos Castaño, jefe del ilegal grupo paramilitar
Fuerza de
Autodefensa Campesina de Córdoba y Urabá (ACCU),
dijo a una
radioemisora local que 19 de sus subordinados y 16 guerrilleros
murieron en el enfrentamiento, que ocurrió cerca de la
localidad de
Pavarando.
El más reciente enfrentamiento en Urabá, en el departamento
de
Antioquia, ocurrió en medio de una renovada ola de violencia
política en
gran parte del territorio colombiano y mientras los dirigentes
de las
FARC se preparan para sostener sus primeras conversaciones de
paz
con el gobierno en seis años, en una amplia región
desmilitarizada del
sudeste del país.
El conflicto civil en Colombia, que comenzó hace tres décadas,
ha
costado la vida a más de 35,000 personas sólo en
los últimos 10 años.
Las autoridades colombianas declinaron confirmar el jueves la
cifra de
muertos en el combate en Urabá.
``Hubo combates, pero solamente cuando tenemos los víctimas
en la
morgue podemos decir cuántos muertos hay'', dijo el gobernador
del
departamento de Antioquia, Alberto Builes.
Los jefes de las unidades del ejército colombiano en la
región informaron
oficialmente el jueves que tres personas murieron y seis resultaron
heridas en el combate, pero tradicionalmente los guerrilleros
y
paramilitares retiran a sus bajas del frente del combate y los
sepultan en
tumbas sin marcar.
La región de Urabá, que comprende también
parte de la provincia del
Chocó y se prolonga hasta la frontera con Panamá,
es una de las zonas
más violentas de Colombia.
En las últimas dos semanas se han desatado combates entre
fuerzas
rebeldes y grupos paramilitares en el norteño departamento
de Bolívar y
cientos de familias campesinas han tenido que abandonar sus hogares.
Medios de prensa locales informaron que en el departamento central
de
Tolima al menos 50 miembros de las FARC y unos 10 soldados
murieron en combates entre el ejército y una columna guerrillera
dirigida
por unos de sus principales jefes, Alfonso Cano.
Analistas políticos afirmaron que todas las partes involucradas
en el
conflicto civil colombiano intentan ganar control territorial
y fortalecer sus
posiciones, en espera de un posible fracaso de las negociaciones
de paz
entre el gobierno y la guerrilla.
A comienzos de noviembre, el presidente colombiano Andrés
Pastrana
ordenó la retirada de unos 2,000 soldados de una amplia
zona de la
región sudoeste colombiana que comprende partes de los
departamentos
del Meta y Caquetá, como condición preliminar para
iniciar las
conversaciones con las FARC.