Chávez garantiza el petróleo a Castro
GERARDO REYES
El Nuevo Herald
El gobierno del presidente Hugo Chávez dio una vuelta
más a los lazos de solidaridad que lo unen con Cuba al anunciar
que recientemente aprobó una nueva
refinanciación de la deuda que la isla ha acumulado por
el atraso en el pago de suministro de petróleo.
Con esta nueva concesión Cuba registra una mora de $50 millones, según el ministro de Energía y Minas, Rafael Ramírez.
La medida provocó una ola de indignación en Venezuela,
un país que tiene prácticamente cerradas las puertas del
crédito internacional debido a la crisis por la que
atraviesa la economía.
Algunos miembros de la oposición y expertos en petróleo denunciaron que la nueva refinanciación dilata ilegalmente el cobro de una deuda de más de $266 millones.
''Lo que el gobierno está haciendo es refinanciar los refinanciamientos ya refinanciados'', dijo a El Nuevo Herald el economista José Toro Hardy, ex director de Petróleos de Venezuela (PDVSA).
''Es un escándalo'', agregó Toro Hardy. ``Venezuela
no puede aspirar a un crédito ni tan siquiera parecido a las condiciones
y garantías que el país le ofrece a Cuba en
materia petrolera''.
Un fiscal venezolano elevó una consulta al fiscal general
Isaías Rodríguez para esclarecer la vía legal a través
de la cual podría presentar una denuncia contra el
presidente Chávez por haber incurrido en uno los delitos
contenidos en la Ley Orgánica de Salvaguarda del Patrimonio Público.
Pero el proceso no tiene muchas
posibilidades de avanzar dado que Rodríguez ordenó
una investigación contra su subalterno.
Bernardo Alvarez Herrera, embajador de Venezuela en Washington, quien hasta hace cuatro meses fue viceministro de Hidrocarburos, dijo a El Nuevo Herald que estas concesiones a Cuba no deben ser consideradas como decisiones comerciales sino políticas con ``el mejor cliente del Caribe''.
''Si los precios [del petróleo] están muy altos,
yo te puedo dar financiamiento, pero si están bajos no lo puedo
hacer'', explicó. ``Hay quiénes exprimen [al cliente] y se
lo
tragan''
En los dos últimos años se han hecho dos ajustes
para salvar la situación morosa del gobierno cubano. En octubre
del 2001, cuando el saldo en rojo llegaba a $90
millones, PDVSA suspendió el envío de un promedio
de 53,000 barriles diarios a Cuba.
Sin embargo el ministro encargado, José Luis Pacheco, aprobó una refinanciación del contrato explicando que los estragos causados a la isla por el huracán Mitchell y la caída del turismo por los ataques terroristas del 11 de septiembre, justificaban ampliamente el incumplimiento.
En abril del año pasado, el gobierno de Cuba continuaba atrasado en los pagos. Las deudas vencidas llegaban a $142 millones. Antes de que PDVSA tomara una decisión de suspender el suministro, de nuevo el ministerio aprobó un plan de refinanciación que consistía en que Cuba pagaría en siete cuotas la deuda y una vez pagada la primera cuota se enviaría el petróleo.
Cuba pagó en septiembre la primer cuota de $28 millones
y consiguió un nuevo plan de refinanciación hace dos semanas
luego de que los medios de comunicación de
Caracas hicieron eco a un informe de la Gerencia de Auditoría
Corporativa de PDVSA que fijó las obligaciones contractuales de
Cuba en $144 millones.
Esta auditoría refleja una cifra más baja que la actual debido a que el cierre de la misma fue en agosto del año pasado. Los auditores recomendaron exigir a Cuba pagos adicionales y mayores garantías. Sin embargo Cuba no tiene un respaldo financiero para garantizar los pagos, según los expertos consultados por El Nuevo Herald.
''Lo que el gobierno venezolano está recibiendo son unos
pagarés de Cuba que no tienen ningún valor porque nadie en
el mundo está dispuesto a servir de fiador de
Cuba'', explicó a El Nuevo Herald Juan Fernández,
ex directivo de PDVSA. ``¿Cuál es la esperanza de cobro?,
ninguna''.
Fernández recordó que el tratamiento especial con
Cuba es tal que en medio de la escasez de gasolina en Venezuela durante
el paro pasado, el gobierno despachó a
Santiago de Cuba un barco con 250,000 barriles de diesel.
Venezuela firmó en octubre del 2000 con Cuba un convenio
de cooperación que incluyó el suministro de crudos. En desarrollo
de ese convenio se acordaron las
condiciones del contrato en virtud del cual se concedieron plazos
de pago de la deuda de 15 años con un dos por ciento de interés
y dos años de gracia. La financiación
abarca no solamente el crudo sino el costo de los fletes.
El Nuevo Herald trató de conocer detalles de la nueva
refinanciación del gobierno venezolano, pero en la oficina de relaciones
públicas del Ministerio de Minas no
respondieron llamadas.
Daniel Cortez, vocero de PDVSA, dijo que no estaba en capacidad de ofrecer información porque el tema lo está manejando el ministerio y no la petrolera venezolana.
Fernández insistió en que PDVSA no es una empresa política sino comercial cuya imagen e integridad patrimonial se verá perjudicada cada vez que salga a buscar créditos en el mercado internacional.
''Si yo llego al mercado con un cliente como Cuba, nadie me presta'',
agregó Fernández. ``Ahora, si lo que quieren es regalar el
petróleo, pues que PDVSA cree la
Fundación de Petróleo Fiado a Cuba''.