Reuters
WASHINGTON
Estados Unidos identificó ayer a una empresa naviera como propiedad del gobierno cubano y prohibió a sus nacionales realizar transacciones con la firma.
La medida fue tomada bajo el argumento de que era necesaria para denegarle recursos al gobierno del presidente de Cuba, Fidel Castro.
De acuerdo con la medida, todo activo de la naviera Melfi Marine que esté en posesión de ciudadanos o residentes de Estados Unidos podrá ser bloqueado por las autoridades norteamericanas, según anunció el martes el Departamento del Tesoro.
''Con este paso, seguimos restringiendo el acceso al capital por parte del gobierno cubano al identificar empresas controladas por Castro'', dijo el subsecretario del Departamento del Tesoro para la lucha contra el financiamiento de grupos terroristas, Juan Carlos Zarate.
La naviera, que ofrece un servicio de transporte de contenedores entre Canadá y Cuba, se convirtió en la duodécima compañía sujeta a la prohibición desde octubre del 2003, cuando el presidente George W. Bush anunció que endurecería el embargo económico contra la isla caribeña de gobierno comunista.
Bush restringió la frecuencia de las visitas al país antillano, la cantidad de dinero enviada a los familiares en Cuba por parte de residentes en Estados Unidos y el contenido de las encomiendas enviadas, entre otras medidas, que fueron criticadas duramente por Castro.
Estados Unidos afirma que las medidas son una reacción ante el encarcelamiento de 75 disidentes en Cuba el año pasado y para acelerar la caída del gobierno unipartidista de Castro, quien opina que Bush sólo desea buscar el voto cubano en el estado de Florida, vital para las elecciones presidenciales.
El Departamento del Tesoro informó que Melfi Marine pertenece a Cimex, un conglomerado controlado por el gobierno cubano, y los recursos aportados por la naviera eran utilizados para perpetuar el gobierno autoritario de Castro.