Diplomática pide cambio drástico hacia Cuba
JUAN CARLOS CHAVEZ
Estados Unidos debe abandonar sus esfuerzos por lograr un cambio de régimen en Cuba y asumir una política "respetuosa que acepte la realidad'' de la isla, afirmó anoche la embajadora Vicki Huddleston, quien dirigió la Sección de Intereses en La Habana entre 1999 y el 2002.
"Es el tiempo de dejar a un lado la idea de cambiar el régimen, lo hemos intentado durante 50 años y no hemos tenido éxito'', dijo Huddleston, al participar en una conferencia entre diplomáticos norteamericanos y expertos en asuntos cubanos, organizada por la Universidad de Miami (UM).
"Si tenemos una política respetuosa que acepte la realidad, entonces Cuba no puede utilizar ningún pretexto para no dar libertades'', agregó la ex funcionaria, quien actualmente funge como investigadora de Brookings Institution.
Huddleston consideró también que una estrategia común de Estados Unidos con Latinoamérica presionaría aún más a La Habana, asfaltando el camino hacia una democratización.
"Se requiere una política de compromiso'', enfatizó.
La conferencia auspiciada por el Centro de Estudios Cubanos y Cubanoamericanos (ICCAS) de la UM, coincide con los pronósticos sobre un eventual viraje de la Casa Blanca respecto a Cuba y la posibilidad de que el presidente Barack Obama elimine las restricciones a los intercambios académicos, el despacho de remesas, el servicio de paquetería y los viajes a la isla.
Además de Huddleston, participaron en el panel Manuel Rocha, ex embajador de Estados Unidos en Bolivia; y James Cason, cuyo paso por la Sección de Intereses marcó una etapa de altas tensiones diplomáticas entre el 2002 y el 2005, debido a su rechazo público por el arresto masivo de 75 opositores cubanos hace cinco años.
El levantamiento de estas regulaciones no requiere la aprobación del Congreso.
Cason pronosticó que Obama ordenará un exahustivo análisis sobre Cuba, pero advirtió que antes de cualquier cambio "debemos ser cuidadosos y mantener a la cabeza del debate qué es lo más conveniente para los cubanos de la isla, y no pensar solamente en lo que es mejor para nosotros''.
Consideró también que las polémicas sobre la flexibilización de los viajes y la apertura del comercio con la isla "fundamentalmente reflejan nuestra incapacidad para entender lo que es vivir en una sociedad totalitaria, donde todos los aspectos de la vida son controlados, y el miedo a la Seguridad del Estado es penetrante''.
Cason respaldó una actitud negociadora, pero hasta que la era de los hermanos Fidel y Raúl Castro haya llegado a su fin.
"Hay personas (de la disidencia) en Cuba que piensan en forma diferente y siempre tenemos que recordarlos'', puntualizó.
El especialista cubano Jaime Suchlicki destacó la pluralidad de opiniones de cada uno de los conferencistas, en un momento importante para el futuro de la nación caribeña.
"Cada postura es distinta y precisamente por esta razón se ha hecho un análisis de las posibles opciones de Obama respecto a Cuba'', dijo Suchliki, director del ICCAS, establecido en 1999 para respaldar una transición democrática en la isla e intercambiar ideas respecto a la agenda cubana.