Cuestionan las restricciones de Bush a Cuba
WILFREDO CANCIO ISLA
El Nuevo Herald
Un prominente grupo de analistas políticos cuestionó fuertemente el panorama de violencia y caos que pudiera generarse en Cuba como resultado de la nueva política impuesta por el presidente George W. Bush para acorralar al régimen de Fidel Castro, pero Washington reiteró ayer su compromiso con una transición pacífica en la isla.
El Diálogo Interamericano --con sede en Washington-- envió una carta abierta al secretario de Estado, Colin Powell, en la que manifiesta profunda preocupación por las conclusiones expuestas en el informe de la Comisión para la Asistencia a una Cuba Libre, y responsabiliza a Estados Unidos por ''la violencia y la inestabilidad social'' que pudieran emerger durante una posible transición política en el vecino país.
''En su conjunto, el informe sugiere que el gobierno de EEUU considera la posibilidad de una transición pacífica subordinada al objetivo mayor de derrocar al régimen de Castro'', señala la misiva. ``Creemos que esa relativa prioridad debe ser revertida y que la transición pacífica en Cuba debe permanecer como el principal objetivo de la la política norteamericana''.
La carta fue redactada y coordinada por Diálogo Interamericano, y firmada por 10 destacados ex funcionarios, diplomáticos y académicos vinculados al problema cubano. El documento fue divulgado a comienzos de este mes, pero no fue hasta ayer que se publicó la respuesta del Departamento de Estado.
Entre los firmantes están William D. Rogers, ex subsecretario de Estado de Ronald Reagan; Shahid Javed Burki, ex vicepresidente del Banco Mundial; Pierre Schori, que representó a Suecia en la ONU; y la ex canciller canadiense Barbara McDougall.
Además fue rubricada por el ex subsecretario de Estado Viron P. Vaky; Peter Hakim (presidente) y Daniel Erikson (director de programas caribeños), por el Diálogo; y los académicos cubanoamericanos Jorge Domínguez, Marifeli Pérez-Stable y Lisandro Pérez.
''Nuestra política ha sido continua y consistente en la búsqueda de una transición pacífica en Cuba'', indicó ayer un funcionario del Departamento de Estado, quien indicó que Powell procura identificar otras medidas en favor de una Cuba postcastrista.
La carta concluye que la Comisión no es una adecuada plataforma para una política hacia Cuba y vaticina que sus recomendaciones ``posiblemente van a dañar el bienestar del pueblo cubano y limitarán el desarrollo futuro de una Cuba democrática''.
La respuesta de Powell indica que EEUU tiene en cuenta las necesidades humanitarias de la población cubana, pero quiere minimizar la afluencia de fondos que sirvan al régimen para mantener su aparato represivo.
El Diálogo Interamericano es considerado el principal foro de análisis político en el hemisferio.