Grupo hotelero busca salir a flote tras la caída del turismo
By EFE
LA HABANA
El Grupo hotelero cubano Gran Caribe, que cuenta con 45 establecimientos
en la isla, entre ellos el Hotel
Nacional y el cabaret Tropicana, prepara la puesta en marcha de acciones
comerciales con el fin de recuperar
turistas tras los atentados del pasado 11 de septiembre en los Estados
Unidos.
Gran Caribe obtuvo el pasado año ingresos brutos por $209.04 millones,
con un 62.7 por ciento de ocupación de
sus capacidades hoteleras, según datos facilitados por la compañía
turística.
Pablo Morillas, vicepresidente de Gran Caribe, dijo el miércoles
que, después de haber sido ''muy bueno'' el
primer semestre del 2001, al cierre de septiembre pasado el número
de usuarios en sus centros bajó 11.7 por
ciento, y 27.5 por ciento el último trimestre .
El directivo consideró que el descenso turístico se ha ampliado
hasta enero de este año por los atentados
terroristas en las ciudades estadounidenses de Nueva York y Washington
el pasado septiembre, la guerra de
Afganistán y los graves daños que causó el huracán
''Michelle'' a su paso por la isla en noviembre pasado.
Manuel Estefanía, también directivo de la compañía
turística, indicó que la empresa trabaja en varios proyectos
para la creación de empresas mixtas en varios puntos de la isla,
en los que tienen a inversores españoles como
principales socios.
La cadena ''Gran Caribe'' es propietaria de 45 instalaciones hoteleras,
de 4 y 5 estrellas, con 10,996 habitaciones
de oriente a occidente de la isla, entre ellas los emblemáticos
hoteles Nacional y Habana Libre, los cabarets
Tropicana y los restaurantes ''El Floridita'' y ``La Bodeguita del Medio''.
Entre sus principales socios se hallan los grupos turísticos ACCOR,
de Francia; los españoles Sol Meliá, RIU
Hoteles, Iberostar, y Hoteles C; Ventaclub, de Italia; y Super Clubs, de
Jamaica.
El Grupo gestiona el 52 por ciento de sus instalaciones y el 48 por ciento
es administrado conjuntamente con
socios de Canadá, España, Italia y Alemania, sus principales
mercados.
Los directivos recalcaron su interés por convertirse en la cadena
hotelera cubana ''por excelencia'', y
consideraron que no sólo se trata de ofrecer al turismo ''sol y
playas'', sino ``también llevar a nuestros espacios
lo mejor de la cultura cubana''.