Por Carmen Edith Torres

Las pruebas de balística hechas a un rifle de asalto entregado por el Negociado Federal de Investigaciones (FBI) al Departamento de Justicia de Puerto Rico confirmaron que fue el arma utilizada por un agente táctico para disparar de forma fatal a Filiberto Ojeda Ríos durante el operativo del viernes pasado.

Esas pruebas fueron realizadas ayer en la mañana en el Instituto de Ciencias Forenses, confirmó el Secretario de Justicia, Roberto Sánchez Ramos.

Hoy el superintendente de la Policía, Pedro Toledo, será entrevistado por funcionarios federales de la oficina del Inspector General del Departamento de Justicia como parte de la revisión solicitada por el director del FBI, Robert Mueller, al operativo del viernes. La entrevista a Toledo será en su oficina en el Cuartel General en Hato Rey.

Aunque esa investigación de la Oficina del Inspector General del Departamento de Justicia federal surgió luego de que diversos sectores levantaron interrogantes sobre el proceder del FBI, funcionarios federales en Puerto Rico entrevistados indicaron que esa pesquisa es un trámite rutinario ante el hecho de que agentes federales resultaron heridos durante el operativo.

El doctor Pío Rechany, director de Ciencias Forenses, indicó que la prueba de balística se hizo comparando el proyectil recuperado en el chaleco antibalas que tenía Ojeda Ríos al momento de enfrentarse con los agentes federales y un disparo de prueba hecho ayer en los laboratorios del Instituto. Rechany explicó que el disparo de prueba se ejecuta haciendo uno con el rifle hacia un tanque especial lleno de agua. Luego ese proyectil se examinó junto al recuperado entre el cuerpo de Ojeda Ríos y el chaleco antibalas, y quedó establecido que las huellas de ambos proyectiles son iguales.

El proyectil corresponde a un rifle de asalto M-4A, que es una carabina de uso regular entre agentes de ley y orden, dijo Rechany.

Sólo un arma ha sido sometida al Departamento de Justicia por el FBI para la investigación que conduce el gobierno local sobre el operativo secreto que produjo la muerte de Ojeda Ríos durante un enfrentamiento con agentes federales.

Sánchez Ramos indicó ayer que “en los próximos días se estará recibiendo el resto de las armas utilizadas en el operativo, según requerido por el Departamento de Justicia a las autoridades del FBI en Washington DC”. También serán entregados los chalecos antibalas y cascos que vestían los agentes que intervinieron en el operativo, dijo el Secretario.

Durante el enfrentamiento, un agente del FBI resultó herido y otros dos recibieron impactos de bala, pero no sufrieron lesiones gracias al equipo protector. El agente federal herido, cuya identidad no fue revelada, fue trasladado fuera de Puerto Rico y está en recuperación, supo El Nuevo Día.

Según el Secretario, el vehículo que usaron los agentes federales para romper el portón en la vivienda de Ojeda Ríos y su esposa Elma Beatriz Rosado Barbosa, en el sector Plan Bonito de Hormigueros, también fue solicitado a las autoridades federales.

De igual modo, fiscales del Departamento de Justicia de Puerto Rico han continuado con las entrevistas a testigos. La viuda de Ojeda Ríos, quien aparte de los agentes federales es la única testigo de lo ocurrido en Hormigueros, podría ser interrogada si ella accede.

El gobernador Aníbal Acevedo Vilá sostuvo ayer que “sólo si ella lo desea” el Departamento de Justicia entrevistará a Rosado.

“El Secretario de Justicia ya se ha comunicado con los abogados de ella y le ha dicho que, si lo desea, él y su personal se entrevistan con ella pero no la van a citar como si fuera una criminal”, afirmó el Gobernador.

Ojeda Ríos, dirigente del grupo independentista clandestino Los Macheteros, tuvo un enfrentamiento cuando los agentes del FBI llegaron hasta su residencia para diligenciar una orden de arresto. Pero están encontradas las versiones sobre qué parte disparó primero. Según el FBI, Ojeda Ríos disparó primero hacia los agentes y éstos contestaron el fuego en defensa propia.

La viuda de Ojeda Ríos, Elma Beatriz Rosado Barbosa sostiene que los agentes llegaron hasta la residencia, tomaron por asalto y dispararon contra la residencia. La investigación identificó de forma preliminar que los agentes federales, del grupo táctico Hostage Rescue Team, dispararon al menos en 100 ocasiones hacia la residencia de Ojeda. Mientras que del interior de la casa hacia afuera se han identificado aproximadamente 20 disparos.