Juez suprime testimonio crucial
 
Nydia Bauzá  PARA PRIMERA HORA

Se debilita caso del WIC.

El juez superior Heriberto Sepúlveda Santiago falló ayer a favor de una petición de la defensa del convicto ex presidente de la Cámara Edison Misla Aldarondo de suprimir el testimonio de un comerciante de Caguas en todo lo que éste alega que el ex legislador José A. Núñez le dijo de parte del líder legislativo.

Sepúlveda declaró ha lugar la moción de supresión de la abogada Laura Maldonado porque dijo que la fiscal especial independiente (FEI), Ana Paulina Cruz, no presentó prueba independiente en el juicio para sostener la alegada conspiración entre Misla y Nú-ñez para exigirle $15,000 al co-merciante Tomás René Flores a cambio de gestionarle una licencia del Programa WIC que le había sido cancelada.

Pero, la fiscal dijo que acu-dirá en alzada al Tribunal de Apelaciones y el juez le concedió hasta el miércoles próximo.

El magistrado sostuvo que si de aquí al miércoles el Apela-tivo no ha paralizado el caso, el juicio continuará ese día a las 10:30 de la mañana. Sólo faltaría el dictamen del juez en el caso, porque ya concluyó el desfile de prueba en el juicio en el que Misla está acusado por un cargo de influencia indebida.

"Respetamos la decisión del juez pero no estamos de acuerdo porque parte de una premisa falsa. Aquí se presentó prueba independiente y éste es un caso de concierto y co-mún acuerdo", sostuvo la fiscal. "Qué más prueba que el comerciante dijo que él fue a la casa de Misla en Puerto Nuevo a entregar el dinero", señaló la FEI.

Sin embargo, Cruz aceptó que la decisión del juez de su-primir esa parte del testimonio debilita el caso.

Ayer, el comerciante, en el contrainterrogatorio de la de-fensa, entró en contradicciones y cambió su versión de que el pedido de los $15,000, que alega que le hizo Núñez en el Salón Café del Capitolio, fue en 1994 y no en 1993 como había dicho este jueves.

Flores había dicho que Nú-ñez le pidió el soborno, de par-te de Misla, poco después de juramentar a la Cámara, en enero de 1993.

El comerciante dijo, sin em-bargo, que nunca habló directamente con Misla sobre el di-nero y que tampoco habló con Núñez en presencia de Misla. "Entre ellos dos sabrán la verdad", sostuvo Flores para agregar que con el testimonio de Núñez el caso "habría sido más sólido".

Flores, principal testigo en el caso, declaró el jueves que el primero de diciembre de 1994 fue con Núñez a la casa de Misla en Puerto Nuevo y le entregó los $15,000. El comerciante dijo que llevó el dinero en una bolsa de papel de estrasa que entregó a Núñez en el balcón de la residencia y que éste entró a la casa y luego sa-lió, sin el dinero, junto a Misla.

Misla está acusado de actuar en concierto y común acuerdo con Núñez entre 1992 a 1994. A Núñez un jurado lo halló culpable de los hechos en diciembre pasado y está pendiente de ser sentenciado.

El comerciante dijo que Nú-ñez era su amigo desde la es-cuela superior y le ofreció "ayudarle" porque sabía que el 11 de marzo de 1992 él recibió una notificación del Pro-grama WIC de que lo habían descalificado por tres años.

El comerciante sostuvo que Núñez le presentó a Misla y dijo que visitó al entonces vi-cepresidente de la Cámara en-tre 10 a 12 veces en su oficina legislativa y otras seis veces en un programa radial que Misla hacía en Miramar, para inquirirle de las gestiones que le había dicho que haría a su favor.

Dijo que el Tribunal de Ape-laciones le falló a favor el 15 de julio de 1993, pero después que se le renovó la licencia, Núñez fue a requerirle el pago de los $15,000 y sostuvo que accedió a pagar por temor a represalias políticas.

De ser hallado culpable por el cargo de influencia indebida, Misla enfrenta una pena de 1 a 5 años de cárcel o multa que va desde $501 a $10,000.

El convicto ex presidente de la Cámara cumple una condena federal de seis años de prisión por el esquema fraudulento de la compraventa del Hospital de Manatí y tendrá que cumplir otra pena de 10 años de cárcel en el foro estatal por el caso de actos lascivos contra su hijastra.