Retorna embajador peruano en Cuba
Tras retornar a Lima atendiendo el llamado a consulta de la Cancillería,
el
embajador del Perú en Cuba, Juan Alvarez Vita, afirmó
que sólo regresará a
La Habana luego que las autoridades de ese país
se retracten o disculpen por los
calificativos que lanzó contra el Perú el
director de asuntos consulares, Juan
Antonio Fernández Palacios. Alvarez Vita aclaró
que su retorno no
significa la paralización de las actividades diplomáticas
del Perú en Cuba, pues el
ministro consejero de la embajada, Alfredo Tejeda Samané,
ha quedado al
frente de la misión, en calidad de encargado de negocios.
"Mi retorno a La Habana dependerá de las conversaciones
diplomáticas entre
ambos países pero, en el marco general que se da a la
institución del llamado
en consulta, será si hay un pedido de disculpas o Cuba
se retracta", afirmó el
embajador quien arribó al aeropuerto internacional Jorge
Chávez a la 1 y 40 de
la tarde.
El diplomático precisó que el llamado en consulta
puede obedecer a varias
razones, "pero generalmente es para trasmitir un resentimiento",
en este caso
por parte del Perú a raíz de las expresiones del
diplomático cubano.
Negó que a consecuencia de los últimos acontecimientos
las autoridades
cubanas se hayan comunicado con él, o que se hayan realizado
manifestaciones contra la sede diplomática del Perú
en La Habana. "Todo
está tranquilo", precisó.
El embajador peruano en La Habana explicó que el motivo
de su retorno tiene
como fin intercambiar ideas en la Cancillería peruana
porque es necesario
considerar el problema en sus múltiples aspectos, uno
de ellos, de quien
provinieron las declaraciones ofensivas.
Comentó que aunque es inaceptable una declaración
de ese tipo, «quien las
dijo no es lo mismo que un canciller».
Añadió que también se debe considerar en
qué contexto se pronunciaron, pero
reiteró que no se pueden aceptar calificativos del calibre
de los que formuló
Fernández.
"De repente el funcionario cubano que dio declaraciones contra
el Perú lo hizo
en un momento de vehemencia y nerviosismo; a título personal
considero que
tal vez perdió el control que un diplomático jamás
debe perder", sostuvo.
Alvarez Vita afirmó que con sus últimas declaraciones
el canciller de Cuba,
Felipe Pérez Roque, busca "que las aguas lleguen a su
nivel".
"Las declaraciones del canciller cubano significan para un diplomático
un
cambio fundamental, pues dio a entender que existe la mejor disposición
para
restaurar las relaciones con nuestro país, y un aspecto
importante es que no
mencionó los calificativos inaceptables que el representante
de Cuba dio en
Ginebra", concluyó.