La
principal responsabilidad en la creación de estos grupos contrarrevolucionarios
la tiene EE.UU.
Revela el Canciller cubano detalles
de las actividades de los llamados disidentes en conferencia de prensa.
Gozaron de todos sus derechos los inculpados en los juicios efectuados
por atentar contra la seguridad del Estado. Demostrada su participación
como mercenarios del imperio
Arsenio
Rodríguez
FotoS: JUVENAL BALÁN
El
papel principal en la creación de estos grupos contrarrevolucionarios,
en su dirección, financiamiento y protección, lo tiene los
Estados Unidos, y tocó a su Sección de Intereses efectuar
este trabajo con sus agentes, afirmó Felipe Pérez Roque en
un momento durante la conferencia de prensa efectuada ayer en la Cancillería
donde brindó una amplia información sobre los juicios efectuados
a los mercenarios al servicio del imperio, juzgados los días 3,
4, 5 y 7 de abril.
Antes, el dirigente cubano precisó
que quería dejar sentado que "el Gobierno y el pueblo de Cuba tienen
muy claramente comprendido que libran, todavía hoy, una dura batalla
por su derecho a la libre determinación, por su derecho a la independencia".
"El pueblo y el Gobierno de Cuba no
pierden ni un minuto de vista, en la idea de que en Cuba se juega la independencia,
el futuro de nuestro país como nación y el disfrute de todos
los derechos para todos los ciudadanos."
Se refirió a los más
de 40 años del férreo bloqueo, económico, financiero
y comercial, de agresiones y acciones terroristas, entre ellos más
de 600 planes de atentados para asesinar al Jefe del Estado cubano, tras
décadas de estímulo a la subversión y a la emigración
ilegal, a los sabotajes, a la acción de grupos armados, toda esa
historia que ha debido sufrir nuestro pueblo, enfrentando la obsesión
de los gobiernos de EE.UU. de construir en Cuba una oposición y
derrocar el poder revolucionario utilizando las armas más sucias,
sin ningún tipo de escrúpulos.
Precisó que se han dedicado
a "fabricar en Cuba una quintacolumna, fomentar la aparición y el
fortalecimiento de grupos contrarrevolucionarios que respondan a sus intereses,
con una clara visión anexionista, quienes serían los encargados
un día de propiciar la anexión de Cuba a EE.UU., en un supuesto
escenario de derrota de la Revolución cubana, que ha sido su obsesión".
Más adelante comentó
acerca de todos los procedimientos aplicados por los gobiernos estadounidenses
en contra de la unidad de nuestro pueblo y el hecho incuestionable de la
autoridad moral de la Revolución cubana, de que la inmensa mayoría
de los cubanos apoya y defiende el innegable liderazgo moral de la dirección
histórica de la Revolución cubana. No ha podido pasar esa
resistencia, que ha causado la admiración en el mundo.
NO SE PUEDE IGNORAR EL DIFERENDO
CON EE.UU.
Precisó Pérez Roque que
no se pueden examinar los recientes acontecimientos en Cuba olvidando que
todavía está planteado en el país un diferendo histórico
y es "el derecho y la lucha de los cubanos por un país independiente,
que ha debido enfrentar las apetencias históricas y los planes concretos
de anexar a Cuba a los EE.UU.".
Para analizar nuestra realidad hay
que tomar en cuenta ese factor, dijo, y Cuba sabe bien que el Derecho Internacional
está de su parte, porque la Carta de las Naciones Unidas le reconoce
el derecho a escoger su propio sistema político, así como
el principio de la igualdad entre los estados y el derecho a la libre determinación
de los pueblos.
Recordó que el bloqueo intenta
violar estos derechos y eso es lo que está en juego hoy, "si un
país pequeño, cercano a una gran superpotencia, puede ser
independiente, que siga su propio camino. Los pactos internacionales de
derechos humanos, aprobados en la ONU y de los que tanto se habla en estos
días, expresan textualmente que todos los pueblos tienen el derecho
de libre determinación", y los cubanos nos hemos dado ese derecho.
"Hemos aprobado una Constitución,
la hemos enmendado, tenemos leyes, tenemos instituciones, tenemos más
de 2 000 organizaciones de la sociedad civil, entre organizaciones no gubernamentales,
instituciones gremiales y tenemos nuestro propio sistema", enfatizó,
y hay que respetarlas y eso es lo que está en juego aquí.
Se refirió a la Carta de la
Organización de Estados Americanos (OEA), de la cual Cuba fue expulsada,
como sabemos, por presiones de Estados Unidos, en la que se expresa que
todo Estado tiene derecho a elegir sin injerencias externas su sistema
político, económico y social y a organizarse en la forma
que más le convenga y tiene el deber de no intervenir en los asuntos
de otros estados, eso plantea la Carta, que se supone sea la piedra angular
de las Américas.
Agregó que luchamos, además,
en contra de las presiones y de la arreciada hostilidad del nuevo Gobierno
de EE.UU., que en el ejercicio de su poderío unilateral en el mundo
ha aumentado hasta grados insospechados su retórica y hostilidad
contra Cuba. Estos antecedentes son importantes y deben ser tomados en
cuenta.
Señaló que con el advenimiento
de la administración Bush se dio "un salto en la hostilidad contra
Cuba. La presencia en puestos clave en el Gobierno de EE.UU. de más
de una veintena de cubanos procedentes de los grupos extremistas de Miami
y la decisión de entregar la principal responsabilidad en el Departamento
de Estado en los asuntos de América Latina, y por tanto de Cuba,
a Otto Reich, propiciaron, junto al compromiso de la deuda de gratitud
que Bush tenía con esos grupos durante la campaña electoral
en su elección, que se desatara una nueva etapa de hostilidad, acrecentada,
contra Cuba".
El Canciller explicó que no
se culpaba al pueblo estadounidense, sobre el cual se tienen sentimientos
de amistad y de respeto, ni tampoco a la mayoría de los cubanos
que viven en los Estados Unidos ni a los amplios sectores de la sociedad
norteamericana, a la intelectualidad, los empresarios, ni siquiera a la
mayoría de la Cámara y el Senado.
Nosotros culpamos —dijo— a los grupos
extremistas de Miami y a los sectores que dentro de la Administración
se han comprometido con esa política de hostilidad.
REFORZAMIENTO DEL BLOQUEO
Más adelante dijo que el camino
seguido contra Cuba "que ha implicado un reforzamiento del bloqueo y de
sus medidas, mayor estímulo que nunca antes a la emigración
ilegal, financiamiento de más de 1 200 horas semanales de radio
contra Cuba y se le ha dado indicaciones a la Sección de Intereses
de Estados Unidos en La Habana de convertirse prácticamente en el
Estado Mayor de la subversión interna en la Isla, con un perfil
del Jefe de esa Sección nunca antes visto".
Destacó que se ha incrementado
el uso de la valija diplomática con medios para que esos grupos
puedan ejercer su labor contrarrevolucionaria, además del irrespeto
a las leyes cubanas y de franco desafío a la institucionalidad legal
de Cuba a la que toda representación diplomática debe respeto.
Respecto a James Cason, el jefe de
la Sección de Intereses, en material televisivo expuesto en la conferencia
de prensa, se demostró la desfachatez de este funcionario al valorar
el papel de los llamados grupos de disidentes para crear en el país
lo que dicen será la transición, antes del pretendido derrocamiento
de la Revolución, y de hecho les orienta qué hacer y cómo
para llevar adelante su acción, además de confesar las diferencias
internas que tienen estos mercenarios.
Felipe Pérez Roque al comentar
las declaraciones de este señor, significó cómo en
esta entrevista, efectuada en diciembre del 2002, reconoce que su tarea
es unir a los grupos, ayudar a crear un programa, y como se ve, viene a
Cuba con la tarea de crear un partido único, y entonces por qué
le molesta tanto que los revolucionarios tengamos un partido único
para defender la Revolución, se preguntó, para agregar que
Cason no habla del dinero que dan instituciones como el Instituto Republicano
Internacional, que recibió 1 674 462 en el 2002 para crear las bases
de apoyo internacional a los activistas en Cuba", entre otros ejemplos.
"Cason marca un momento de la profundización
de la política contra Cuba —agregó—, de la política
abierta y desembozada contra nuestro país". En esa entrevista él
dice que se reúne cada vez que puede con la Fundación Nacional
Cubano-Americana, los que financiaron la cadena de atentados terroristas
contra los hoteles en la Isla, con el Consejo para la Libertad de Cuba,
que es el ala paramilitar de la antigua Fundación, organizadora
de múltiples planes de atentados contra el Presidente Fidel Castro,
entre ellos el de la Cumbre Iberoamericana en Panamá.
Precisó que "sabemos muy bien
a qué ha venido el señor Cason, y tenemos el deber y el derecho
de defender la independencia de nuestro país, usando la legalidad
establecida en Cuba, dentro, del respeto a nuestras leyes y a nuestra ética,
y a nuestro sentido de la vida y de las convicciones que nos mueven".
Posteriormente, el Canciller hizo una
cronología de las medidas que se han ido tomando por el Gobierno
norteamericano para reforzar el bloqueo contra Cuba y la Ley Helms-Burton,
así como el envío de materiales a los grupos contrarrevolucionarios.
En total, se han enviado unos 22 millones de dólares para estos
fines, aunque las propias autoridades estadounidenses reconocen que la
cifra es solo una mínima parte de los fondos canalizados con ese
fin, porque la mayor parte para la subversión se hace por vía
secreta.
Refutó además, las calumnias
divulgadas en el exterior acerca del momento del proceso judicial, vinculándolo
erróneamente con la guerra de agresión a Iraq y los recientes
secuestros de naves cubanas, hechos que nada tienen que ver con los arrestos
que se produjeron los días 18 y 19 de marzo, es decir, antes de
que aquellos hechos, y a la necesidad de poner fin a las actividades mercenarias
y otros actos contra la independencia y las leyes cubanas que se venían
realizando desde hace varios años.
A propósito de la secuencia
de secuestros ocurrida en los últimos 7 meses con igual número
de hechos de este tipo, Pérez Roque consideró que en su opinión,
estos ocurren dentro de un plan consciente, para estimular las salidas
ilegales del país, mediante actos terroristas, creando condiciones
que permitan dar al traste con los Acuerdos Migratorios y realizar el gran
sueño de la mafia contrarrevolucionaria, que siempre se opuso a
estos.
Informó que la reducción
drástica de las cifras de los cubanos que reciben visas para radicar
en Estados Unidos, que en este último año solo ha sido el
2,5% de las cantidades mínimas permitidas por los Acuerdos, revela
que se está creando con esto un nuevo escenario de agresiones y
provocaciones por parte de las autoridades estadounidenses.
Recordó que, paralelamente,
nuestros Cinco Héroes Prisioneros del imperio son enviados nuevamente
a celdas de castigo y no es hasta el 2 de abril en que pueden salir. Además,
se han emitido nuevas regulaciones para endurecer el bloqueo y se limitan
aún más las visitas de los norteamericanos a Cuba y se eliminan
los intercambios, restringiendo de manera arbitraria las visas a los cubanos,
entre otras.
PROCESOS LEGALES CON TODOS LOS DERECHOS
Luego de su introducción, el
Canciller se refirió a los 29 juicios efectuados en casi todas las
provincias del país a 75 personas, 74 de ellos hombres, a los que
los tribunales impusieron entre 6 y 28 años de privación
de libertad, precisando que son falsas las informaciones sobre sentencias
de penas de muerte y cadenas perpetuas.
Explicó posteriormente que estos
juicios se efectuaron con respeto absoluto a la legalidad y a las garantías
de los procesados.
Dijo que los procesos penales se instruyeron
con carácter sumario, en virtud de la Ley 5 de 1977, o Ley de Procedimiento
Penal, procedimiento que no es exclusivo de Cuba, sino que está
en más de 100 países, incluido Estados Unidos y que fue implantado
en la Isla desde la época de la colonia.
Este tipo de proceso no niega las garantías
de los acusados, sino que todos han tenido un debido proceso, garantizado
por nuestras leyes. Todos los inculpados conocieron de los cargos que les
imputaban y tuvieron la posibilidad de alegar en cada uno de los juicios.
Argumentó
que todos tuvieron representación legal, con abogados defensores
elegidos por ellos o de oficio. En total fueron 54 los letrados, de ellos
44 designados por los acusados y sus familiares y solo 10 de oficio.
Cada abogado tuvo el derecho de ser
escuchado, por tribunales que ya existían, o sea, que no fueron
creados especialmente para estos casos y por jueces que ya estaban en sus
cargos desde antes. Todos tuvieron su vista oral, donde además de
exponer sus ideas, respondieron preguntas, ya que en Cuba estas vistas
orales son obligatorias.
Pero no solo tuvieron vista oral, sino
que fueron públicos, ya que participaron cerca de 100 personas en
cada uno de ellos, un total de casi 3 000 personas, entre familiares, testigos
y peritos. Fueron los tribunales los que autorizaron a las personas que
participarían.
Acerca de algunos comentarios de diplomáticos,
que se quejaron por no estar presentes, se preguntó que quién
ha dicho que entre sus tareas está esa, si no existen personas de
su país en calidad de acusados, al igual que la prensa, tampoco
participaron centenares de revolucionarios que hubieran querido estar presentes
en estos juicios.
Los abogados por su parte tuvieron
acceso a los expedientes antes del juicio, no como ha sucedido con los
defensores de nuestros Cinco Compatriotas. Ninguno fue sometido a celda
de castigo y ahora todos tienen derecho a recurrir las sentencias.
DESENMASCARA A LOS FARSANTES
Nuestro Canciller, además de
las intervenciones grabadas de dos agentes de la Seguridad cubana, demostró
cómo se descubrió la falsedad en que vivían estos
contrarrevolucionarios. Supuestamente eran 37 los periodistas encausados,
pero los que estudiaron o lo ejercieron en algún momento fueron
solo 4 y, de los que se autotitulan como tales, solo 14 tienen estudios
universitarios, lo que es una falta de respeto a los profesionales cubanos
y extranjeros que ejercen esa profesión en Cuba.
Esta y otras aclaraciones fueron hechas
por Felipe para demostrar la falsedad de algunos comentarios en el exterior
en cuanto a que "la intelectualidad cubana estaba presa", desconociendo
que Cuba es un Estado de derecho y que a los enjuiciados se les aplicaron
las leyes por dañar la soberanía nacional a favor de una
potencia extranjera.
Acto seguido el Canciller comenzó
a mostrar fotos y documentos donde se demuestra la culpabilidad de cada
uno de los encausados, cómo recibían dinero y regalos, así
como materiales. Entre las fotos, una donde Cason funda nada menos "que
la rama juvenil del Partido Liberal Cubano", lo que fue probado en el juicio.
Es tanto el apoyo brindado que estos
contrarrevolucionarios contaban con pases para entrar a cualquier hora
en la Sección de Intereses, mientras que por diferentes vías
recibían dinero, lo que quedó demostrado por la "contabilidad
que llevaban estos grupos". A uno de los inculpados se le descubrieron
13 600 dólares en el forro de un traje, mientras otro escondía
casi 5 000 dólares en una frasco de medicina.
Uno de los acusados, Osvaldo Alfonso,
declaró durante el juicio que él y los otros habían
sido utilizados por la Sección de Intereses en trabajos a favor
de los Estados Unidos y cómo se les había recomendado tener
contactos con representantes de antiguos países socialistas.
En carta recibida por Osvaldo y remitida
por Carlos Alberto Montaner, conocido agente de la CIA y con vínculos
con los contrarrevolucionarios cubanos, le manda dinero y le dice que lo
llamarán "unos amigos españoles de alto nivel para hablar
del Proyecto Varela". Posteriormente, y ante una pregunta sobre el asunto,
el Canciller dijo a los comunicadores presentes que cualquier duda que
le pregunten a Montaner, precisando que el Proyecto Varela forma parte
del plan de subversión contra Cuba y no tiene el menor asidero en
las leyes cubanas.
Como muestra de todo lo planteado,
en entrevistas presentadas durante la conferencia de prensa, dos supuestos
implicados, agentes de la Seguridad del Estado, dieron sus testimonios.
Ellos fueron Odilia Collazo, presidenta
del Partido de los Derechos Humanos, y Néstor Baguer, presidente
de la Asociación de Periodistas Independientes, quienes brindaron
valiosa información acerca del comportamiento de los mercenarios,
su dependencia económica a la Oficina de Intereses de Estados Unidos
y su labor de servicios a una potencia extranjera.
Se demostró que la mayoría
de los inculpados no trabajaba, en algunos casos, por años.
CURIOSOS LAMENTOS
Ya al final de su comparecencia, Felipe
se refirió a la repercusión que han tenido estas soberanas
medidas de Cuba, recordándole al Jefe de la Sección de Intereses
que solo se ha dado parte de la información que posee Cuba y le
recomendó que debe "medir la tarea que se ha propuesto o tendremos
que seguir organizándole las reuniones".
Voceros de la Casa Blanca y el Departamento
de Estado se han mostrado quejosos por lo que ellos llaman "presos de conciencia"
y que según ellos espanta a la comunidad internacional, y comentó
el Canciller cubano que el espanto de esta última es por las barbaridades
que se cometen en la agresión a Iraq, por los detenidos sin juicio
en la Base Naval de Guantánamo y los más de 2 000 presos
en cárceles norteamericanas de los cuales no se les conoce ni siquiera
el nombre.
Al respecto, Pérez Roque fue
categórico al afirmar: "Nosotros creemos que el Gobierno de los
Estados Unidos es el menos calificado para valorar lo que ha pasado en
Cuba y debería callar por pudor".
Acerca de las declaraciones de voceros
de la Unión Europea les recordó que esta agrupación
nunca se ha pronunciado por la situación de nuestros Cinco Compatriotas
presos injustamente en cárceles norteamericanas y cómo en
su momento llegó a un entendimiento con los Estados Unidos sobre
las leyes anticubanas.
Luego precisó que en una ocasión
retiramos nuestra solicitud para entrar al Acuerdo de Cotonú, y
que si lo solicitamos ahora es porque los amigos del Caribe, Asia y África
nos lo han solicitado y que lo podemos retirar nuevamente.
En cuanto a la Canciller y la Ministra
de Cultura de España, señaló la ignorancia que demuestran
con sus declaraciones a favor "de los intelectuales cubanos" y les pidió
que atendieran a ese 90% de la población que grita No a la guerra
contra Iraq en todas las ciudades de España.
Igualmente, le llamó la atención
la declaración del Director de la UNESCO y le sugirió que
se dedicara a tratar de ayudar a los millones de personas que no saben
leer en el planeta.
Ya al final de la entrevista y en respuesta
a las preguntas de los periodistas, Felipe Pérez Roque se refirió
a la declaración del Canciller mexicano, precisando que adelantó,
de forma diplomática, la postura que ese país asumirá
en Ginebra, y negó que Cuba haya pensado en ningún momento
ningún tipo de canje de estos presos con nuestros Cinco Heroicos
hermanos presos.
Sobre todo, por las grandes diferencias
que existen entre unos y otros, ya que nuestros compañeros son inocentes
y están encarcelados por luchar contra el terrorismo y les fueron
negadas todas las garantías.
Hay además diferencias profundas
en las motivaciones y la calidad moral y los procesos legales, afirmó.
Al concluir, un colega recordaba las
palabras de nuestro Canciller en un momento de la conferencia, acerca de
que "nosotros sí defendemos nuestra soberanía y sabemos el
precio que nos cuesta". |