Disidentes llaman a los cubanos a impulsar cambios
WILFREDO CANCIO ISLA
El Nuevo Herald
En un esfuerzo por acelerar la transformación democrática
en Cuba, el movimiento disidente anunció ayer un programa de apertura
política y económica
para movilizar a la población, y alertó sobre
el peligro de un estallido social en la isla.
La coalición Todos Unidos, que agrupa a importantes sectores
de la disidencia interna, presentó el documento titulado ''Propuesta
de programa para
comenzar a solucionar los graves problemas de la sociedad cubana'',
que exhorta a los cubanos de la isla y del exilio a compartir la iniciativa
para impulsar
los cambios.
''Este programa no busca diseñar una transición,
sino iniciar los cambios urgentes que se necesitan para superar la situación
existencial del pueblo
cubano'', declaró Vladimiro Roca, líder y portavoz
de Todos Unidos. ``Mientras no se movilice al pueblo, los cambios no van
a producirse''.
Roca, junto al activista Elizardo Sánchez, presidente
de la Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación
Nacional (CCDHRN), dio a conocer la
propuesta ayer durante una conferencia de prensa en La Habana
simultáneamente seguida por vía telefónica desde las
oficinas de Acción Democrática
Cubana (ADC) en Miami.
El programa de 36 puntos fue elaborado tras una consulta que
involucró a más de 30,000 ciudadanos dentro del país,
entre diciembre del 2002 y agosto
del 2003, así como a decenas de exiliados cubanos en
Estados Unidos, Europa y América Latina.
Algunas de las medidas sugeridas por Todos Unidos incluyen la
liberación de todos los presos políticos, la abolición
inmediata de la pena de muerte y la
libertad para entrar y salir del país.
En la esfera económica, la propuesta apunta, entre otras,
al aumento de los salarios y las jubilaciones, la rebaja de precios en
las tiendas que venden en
dólares y la eliminación del cobro en dólares
de los servicios prestados por el Estado a los ciudadanos.
Además, busca eliminar la escuela al campo y el servicio
militar obligatorio. ''Para esto el gobierno no tiene que hacer grandes
gastos e inversiones, sólo
remitirse a la letra de la Constitución vigente y cumplir
lo que ésta establece'', indica el documento.
Roca advirtió que con el inmovilismo gubernamental, el
país corre el riesgo de un estallido social que desemboque en una
situación violenta e impida una
transición pacífica.
Además de circular el texto en todo el país, Roca
se comprometió a presentarlo en su circunscripción electoral
de barrio y, si fuera reclamo popular, elevarlo
a la Asamblea Nacional.
La organización ADC aspira a imprimir unas 60,000 copias para introducirlas y distribuirlas dentro de Cuba.
Este es el tercer programa de la oposición para propiciar
cambios democráticos en la isla. Primero fue el Proyecto Varela,
anunciado en el 2002; luego vino
la Declaración suscrita el pasado año por miembros
de la Asamblea para promover la Sociedad Civil y la Fundación Lawton
de Derechos Humanos.