Ayuda a Cuba crea torbellino
WILFREDO CANCIO ISLA
El Nuevo Herald
La propuesta de llevar ayuda humanitaria a Cuba tras el paso del huracán Dennis está nuevamente bajo un torbellino político.
El punto de máxima fricción entre líderes y grupos del exilio cubano está en las restricciones decretadas hace un año por George W. Bush para limitar los viajes, paquetes y remesas a la isla, y sometidas nuevamente al debate sobre la posibilidad de levantarlas temporalmente.
Los congresistas cubanomericanos del sur de la Florida --Ileana Ros-Lehtinen, Mario y Lincoln Díaz-Balart-- se adelantaron ayer a reafirmar su negativa.
''No es necesario cambiar la ley o las regulaciones existentes para ayudar a las víctimas del huracán Dennis'', indicó una declaración conjunta de la tríada congresional. ``Cualquier intento de explotar la actual crisis humanitaria para cambiar la ley o las regulaciones es desafortunado, ya que la ley autoriza el envío de cantidades ilimitadas de ayuda humanitaria al pueblo cubano a través de grupos de la sociedad civil independiente a lo largo de la isla''.
Los legisladores recomendaron a la comunidad que canalice sus esfuerzos humanitarios mediante grupos como MAR por Cuba, Grupo de Apoyo a la Democracia (GAD) y Plantados, los cuales poseen licencia del Departamento del Tesoro para enviar ayuda.
Pero organizaciones como el Movimiento Democracia, Puentes Cubanos y Comisión Cubanoamericana de Derechos Familiares consideran que la devastación causada por Dennis amerita una respuesta más efectiva.
''Si hay un momento que justifica una excepción para levantar esas medidas es éste'', declaró anoche Silvia Wilheim, directora ejecutiva de Puentes Cubanos. ``Es hora de respetar el derecho a la familia cubana de ayudar a los suyos dentro de la isla''.
Wilheim fomenta una campaña en la comunidad cubana para pedir al Departamento de Estado un levantamiento expedito de las medidas.
Mientras, el Movimiento Democracia ha escrito una carta al presidente George W. Bush pidiendo lo mismo, pero también ha dirigido un mensaje a personalidades simpatizantes del gobierno cubano para que aboguen ante Fidel Castro y sean retirados los impuestos sobre las remesas en dólares. Entre las figuras están los Premios Nobel Rigoberta Menchú, Gabriel García Márquez y José Saramago.
La Fundación Nacional Cubanoamericana (FNCA) anunció ayer la creación del Cuba Relief Fund, un fondo creado con contribuciones de los miembros de esa entidad para ayudar a las familias necesitadas en la isla.
Según Alfredo Mesa, director ejecutivo de la FNCA, los envíos se harán ``a través de parroquias y otras vías, para asegurar que los recursos no terminen en las manos del gobierno cubano''.
No obstante, ``la FNCA considera que no debe usarse el huracán para lograr cambios en la política hacia Cuba''.
La FNCA y el Movimiento Democracia pertenecen a Consenso Cubano, una sombrilla de organizaciones agrupadas con el fin de favorecer posturas más flexibles en la política hacia Cuba. Pero el tema de la ayuda humanitaria no parece haber logrado una posición única dentro de la agrupación.
''No hemos llegado a un acuerdo sobre la ayuda'', reconoció Carlos Saladrigas, portavoz de Consenso Cubano y director del Cuban Study Group (CSG). El CSG abogó por levantar las medidas el pasado año, tras los destrozos causados por el huracán Iván.