Exiliada presenta demanda por difamación contra veterano cazador de espías cubanos
WILFREDO CANCIO ISLA
Un veterano oficial de la contrainteligencia militar que participó en la captura de Ana Belén Montes, la célebre espía de Cuba en el Pentágono, fue demandado el jueves por difamación en un tribunal federal de Miami.
La demanda contra el teniente coronel Chris Simmons --miembro de la reserva del Ejército y ex analista de la Agencia de Inteligencia de Defensa-- fue interpuesta por la activista cubanoamericana Silvia Wilhelm, quien lo acusa de hacer declaraciones difamatorias en un programa de televisión.
El texto de cinco páginas señala que Simmons se presentó el 8 de octubre en el programa A mano limpia del Canal 41-AmericaTevé para declarar "falsamente y con temerario desprecio por la verdad'', que Wilhelm era una agente al servicio del gobierno cubano.
"La publicación de estas falsas y malintencionadas declaraciones constituye un acto de difamación y ha dañado la reputación personal y profesional de la demandante, con riesgos para su integridad física'', indica el documento.
La demanda busca una compensación superior a los $75,000. El caso fue asignado a la jueza Marcia G. Cooke.
Wilhelm, directora ejecutiva de las organizaciones Puentes Cubanos y Comisión Cubanoamericana para los Derechos de la Familia, es una reconocida activista contra el embargo. Llegó a Estados Unidos en 1961 como parte de la Operación Pedro Pan y reside actualmente en Miami.
Para representarla en el litigio, Wilhelm escogió al abogado Bruce Rogow, profesor de la universidad Nova Southeastern y con una experiencia de 44 años en casos civiles y criminales. Entre sus clientes en casos recientes figuran Donald Trump, Don King y los bancos de inversión Morgan Stanley y Merrill Lynch.
Rogow no pudo ser localizado el jueves. Simmons, que reside en Virginia, declinó hacer comentarios alegando que desconocía la demanda.
Ana Margarita Martínez, ex esposa del espía cubano Juan Pablo Roque y colaboradora de Simmons en un libro y una película sobre espionaje en Miami, dijo a El Nuevo Herald que ella tampoco estaba enterada de la acción legal.
Desde agosto pasado, Simmons ha comparecido en varias oportunidades ante los medios de Miami para contar sus experiencias en la captura de Montes, la agente de mayor rango en la historia del espionaje cubano en Estados Unidos. Montes, de origen puertorriqueño, fue arrestada en el 2001 y cumple una condena de 25 años de cárcel.
En sus intervenciones también ha acusado de agentes del régimen de La Habana a otras seis personalidades académicas y exiliados cubanos: los profesores Marifeli Pérez Stable, Alberto R. Coll, Lisandro Pérez, Gilliam Gunn Clissold y Julia Sweig, además de Gilberto Abascal, informante del FBI en el caso del militante anticastrista Luis Posada Carriles.
Simmons afirmó entonces que basaba sus conclusiones en archivos no clasificados, entrevistas con desertores de la inteligencia cubana y testigos cuya identidad no reveló, y sugirió que los aludidos tenían la opción de utilizar las vías legales para rebatir sus denuncias.
Respecto a Wilhelm, Simmons aseguró que el espía convicto Carlos Alvarez, ex profesor de la Universidad Internacional de la Florida (FIU) y capturado en el 2006, la identificó como agente del gobierno cubano durante su confesión al FBI, lo que presuntamente determinó que ella se retirara de las labores de espionaje.
Wilhelm lo negó rotundamente.
De acuerdo con un comunicado divulgado el jueves, "Wilhelm está comprometida a poner fin a las falsas y difamatorias declaraciones que perjudica tanto a la verdad como a los empeños de los dedicados y patrióticos cubanoamericanos que buscan la reconciliación de la familia cubana''.
"Es hora de que alguien detenga a este tipo escandaloso, que aparece en público diciendo que nosotros somos espías y aparentemente se sale con la suya'', expresó Lisandro Pérez, profesor de FIU y quien considera también entablar una acción legal contra el teniente coronel estadounidense.
Al menos otras dos personas mencionadas en la "lista de espías'' están considerando también demandar a Simmons, según conoció El Nuevo Herald.
En la demanda, Wilhelm menciona que durante el programa A mano limpia no sólo Simmons, sino también el conductor y periodista Oscar Haza distorsionó los hechos al afirmar que la activista estaba casada con un oficial de alto rango del Ejército estadounidense. El militar aludido era el general Charles Wilhelm, ex jefe del Comando Sur.
El esposo de la activista, el doctor Charles Wilhelm, es un internista
que fue condecorado durante la guerra de Vietnam por su participación
en la división médica de la Fuerza Aérea de Estados
Unidos, pero desde entonces no ha tenido más vínculos con
ninguna entidad militar.