Por Marcelo Fernández-Zayas
En estos momentos se está discutiendo en la prensa las declaraciones
del desertor
del servicio de inteligencia cubano, Mayor Juan Antonio Rodríguez
Menier
(Coqui). Este miembro de la Dirección de Inteligencia (DI), abandonó
su centro
de espionaje en Hungría en 1986 y vino a los Estados Unidos. Ha
vivido por un
tiempo, bajo la protección de las autoridades federales. Rodríguez
Menier,
sorpresivamente, arribó a París a fin de testificar ante
las cortes francesas, entre
otras cosas, sobre las operaciones de narcotráfico de Cuba y hechos
relacionados con el asesino y terrorista venezolano Carlos (El Chacal),
agente de
origen venezolano que trabajaba para Cuba. Al mismo tiempo, en un artículo
que
escribí anteriormente, http://www.mundolatino.org/cuba/cubaeses.htm,
daba
nombre y detalles del lavado de dinero y el narcotráfico entre Colombia,
Cuba y
España.
He recibido muchas comunicaciones pidiendo más información
al respecto.
Daremos nuevos datos de la historia de narcotráfico del actual gobierno
de Cuba.
Estamos hablando de un viejo negocio revisado ahora, por las acusaciones
de
Ileana de la Guardia, exiliada en Francia, hija del coronel cubano Antonio
de la
Guardia Font, fusilado en unión del general Arnaldo Ochoa y dos
altos oficiales
más en Cuba en 1989. Ileana, acusa al gobierno cubano de varios
delitos
internacionales y específicamente de narcotráfico. Sin embargo,
lo revelado hasta
el momento es el mínimo que dio a conocer Cuba sobre el caso cuando
las
ejecuciones antes mencionadas.
El juicio y condena de estos cuatro oficiales cubanos se convirtió
en "causa
célebre", ya que los mismos admitieron estar envueltos en el narcotráfico
internacional. Hasta el momento no mucho se conoce de este caso fuera de
la
versión oficial de Cuba. A raíz de estas actividades clandestinas
y en conexión
con el caso De la Guardia y Ochoa, fue arrestado y condenado a 20 años
de
prisión el general José "Pepe" Abrahantes, Ministro del Interior
(MININT) y jefe
de los servicios de inteligencia cubanos. Pepe Abrahantes se consideraba
la
persona más allegada a Fidel Castro. Era el mismo confidente y jefe
de la guardia
personal del dictador cubano. Poco tiempo después de haber sido
arrestado,
Abrahantes murió en prisión a consecuencias de un ataque
al corazón, según
reportaron las autoridades cubanas y confirmado por varios testigos.
Es difícil de precisar cuando Cuba comenzó a envolverse en
el narcotráfico.
Algunos, como Rodríguez Menier (Coqui), aseguran que estas actividades
se
remontan a la década del 70. Sin embargo, lo que nosotros podemos
probar es
que comenzó a principios de la década del 80. Este es el
recuento.
El colombiano Fabio Vásquez Castaño, del movimiento insurgente
M-19, logró
establecer contacto con Manuel Piñero Losada (Barba Roja), director
del
Departamento América, sección de inteligencia del Partido
Comunista Cubano.
Vásquez Castaño propuso un negocio que consistía adquisición
de armas de
Cuba y pagos en cocaína. Piñero, expuso, a los más
altos gobernantes cubanos
que las drogas con destino a los Estados Unidos eran un elemento
desestabilizador del gobierno y sociedad de este país. Al mismo
tiempo, la
cocaína era el equivalente a moneda convertible y por otro lado
se ayudaba a los
rebeldes colombianos. El negocio fue aprobado. La más alta jerarquía
de Cuba
era Fidel Castro, su hermano Raúl y el general y Ministro del Interior
José
Abrahantes. Aunque los hermanos Castro negaron conocimiento de este negocio,
el mismo tenía forzosamente que ser conocido por el jefe de todos
los servicios
de inteligencia, general José Abrahantes.
En aquellos tiempos, el gobierno cubano dejó saber que los cargamentos
de
drogas que se confiscaban a narcotraficantes eran destruidos, por incineración,
en
los hornos de la empresa siderúrgica Antillana de Acero, localizada
en el
municipio de El Cotorro, en las inmediaciones de la ciudad de La Habana.
Estas
operaciones de destrucción de drogas eran publicadas en la prensa
cubana.
Los cargamentos de drogas confiscadas eran mantenidos en almacenes del
MININT. El encargado de supervisar la operación de destrucción
de las drogas
era el teniente coronel del Rosal, casado con una hija del que fuera por
un tiempo
jefe de inteligencia de Cuba, general Ramiro Valdés (Ramirito).
Hasta aquí la versión oficial, pero desertores y otras fuentes
cubanas dan una
diferente. Presentamos los datos sin que hayamos podido verificar, ciertos
aspectos de los mismos por razones obvias. Sin embargo, los informantes
tienen
gran credibilidad. Lo que se transportaba y quemaba en la empresa Antillana
de
Acero, era material de desperdicio. La verdadera droga era transportada
a
barcos de la Marina de Guerra de Cuba, al mando del Almirante Aldo Santamaría
Cuadrado, quién después la transportaba a naves de contrabandistas
o traficantes
no residentes en Cuba.
Las armas entregadas al M-19 en Colombia, eran de origen estadounidense
compradas en Viet Nam por el general patricio de La Guardia Font. Actualmente
cumpliendo en Cuba una condena de 30 años de prisión, por
haber estado
complicado en la causa donde fue fusilado su hermano gemelo Antonio (Tony).
Las armas eran llevadas a Colombia por el vice ministro del MININT, Pascual
(Pascualito) Martínez Gil, quien tenía entre sus funciones
cuidar el yate personal
de Fidel Castro. No hemos podido determinar con certeza la cantidad de
armas y
drogas en el tráfico de Colombia y Cuba. Fuentes colombianas aseguran
que
estas armas fueron identificadas por el servicio de inteligencia. estadounidense
como pertenecientes a sus tropas cuando combatían en Viet Nam. ¿Quién
autorizó esta operación de tráfico de armas y drogas
en Cuba? Según fuentes
allegadas a Santamaría y los hermanos De la Guardia, la orden provino
directamente del vice presidente cubano Raúl Castro Ruz.
¿Conocía el Ministro del Interior general José Abrahantes
de estas operaciones
de contrabando? Muy difícil que desconociera las mismas, porque
en ellas
participaban muchos de sus hombres de confianza y se utilizaban recursos
y vías
de su servicio de inteligencia. Sin embargo, nunca se dio por enterado
de estas
operaciones, porque los integrantes del grupo reportaban directamente a
Raúl
Castro.
Coronel Antonio (Tony) De la Guardia Font
Posiblemente este hombre pase a la historia como un James Bond del Caribe.
Lo
conocí, al igual que su hermano gemelo Patricio, cuando estudiábamos
en la
universidad de La Habana, en 1959. En aquel tiempo eran más amantes
de la
dolce vita que de la política y giraban en el círculo del
entonces comandante del
Directorio Revolucionario, Rolando Cubelas Secades. Tony y Patricio eran
gemelos idénticos, casi imposibles de distinguir físicamente.
Patricio era más serio,
reservado y calculados, ambos muy inteligentes y simpáticos. Tony
tenía afición
por la pintura, las armas, los deportes y las mujeres. Conocieron a Fidel
cuando el
equipo de remos de la Universidad de la Habana competía contra otros
equipos
de canoas. A Fidel le gustó las personalidades de estos valientes
y aventureros
hermanos. Con el tiempo llegó a intimar con Tony, hasta el punto
que se daba el
lujo de bromear con y acerca de Fidel, cosa que este último a pocos
permite.
Antonio (Tony) De la Guardia, frecuentemente cumplía misiones especiales
de
inteligencia, asignadas por el propio Fidel Castro en los Estados Unidos,
país
donde el primero cursó su educación secundaria. Una de estas
misiones consistió
en atraer un grupo de exiliados cubanos para un "diálogo" en la
década del 70.
Este diálogo era parte de un proceso de acercamiento a Cuba por
la
administración del presidente Jimmy Carter, quien delegó
su implementación al
Secretario de Estado Cyrus Vance. Como resultado de este intento de
acercamiento, los viajes legales a Estados Unidos de Tony De la Guardia
se
multiplicaron.
Agencias de inteligencia estadounidenses vigilaban sus frecuentes viajes
a New
York, New Jersey y la Florida durante este período. En Miami reportan
gastó
miles de dólares comprando todo tipo de equipos electrónicos
y ropas
principalmente. Llamó la atención de sus acompañantes
cubanos, en Miami, la
cantidad de dinero en efectivo que él llevaba. Uno de ellos me refirió
que gustaba
comprar ropas de diseñadores conocidos y caros. Así como
ropas idénticas para
su hermano gemelo Patricio.
Otras de las misiones de Tony De la Guardia era la de obtener dólares
para Cuba
por todos los medios posibles. En el servicio de inteligencia cubano, Tony
tenía un
poder superado sólo por el ministro Abrahantes. Por otro lado, su
hermano
Patricio, llegó a ser jefe de las Tropas Especiales del MININT,
fuerza militar
escogida que sólo podía ser movilizada por Abrahantes o los
hermanos Castro.
También se creó para que Tony hiciera su trabajo, en el MININT,
un
departamento especial, conocido como: MC (Moneda Convertible).
GENERAL JOSE "PEPE" ABRAHANTES
Uno de los hombres más poderosos de la revolución cubana
en sus cuarenta años
de existencia fue Pepe Abrahantes. Hijo de un viejo y poderoso militante
del
Partido Comunista Cubano. Se exilió en México muy joven,
cuando la lucha
contra Fulgencio Batista. Pepe era muy organizado y de una personalidad
gentil,
caballerosa y modales muy correctos. Hombre paciente, observador y muy
balanceado. Fue puesto a trabajar con Castro por recomendación de
su padre.
Se compenetró tanto con el "Comandante", que algunos bromeaban diciendo
que
era el mejor "loquero" de Cuba. Por otro lado, era hombre que tomaba grandes
decisiones en forma calmada, fría y las ejecutaba con gran éxito.
Era persona
sumamente discreta en su vida pública y privada. Un sicólogo
nato, calculador y
de mente rápida. Su muerte fue sentida por todo los que con él
estaban
asociados. Su desaparición marcó el declive de los servicios
de inteligencia
cubanos. Ya que más de 1,500 personas fueron purgadas después
de su arresto.
¿Qué había en los archivos personales de Abrahantes?
La vida y milagros de
cubanos y extranjeros.
Entre los allegados a Fidel, familiares y amigos íntimos, celebraban
anualmente su
cumpleaños el 13 de agosto en una de sus residencias, localizada
en la playa de
Tarará. Los asistentes le regalaban artefactos electrónicos,
antigüedades y armas.
Se comenta, que "Pepe" Abrahantes, en el año de 1988 le regaló
una maleta llena
de dólares proveniente de los negocios que tenía el MININT.
Aunque se
especula mucho acerca del monto de este regalo no creo que se sepa nunca
con
certeza. Abrahantes comentó solamente: "unos dólares para
la revolución".
Posiblemente, quién hubiera podido saber la cantidad de dinero hubiera
sido el ya
fallecido Pepín Naranjo, que actuaba muchas veces como el "contador
privado
del Comandante".
¿Cómo se implicó Abrahantes en el negocio del narcotráfico?
Hasta el momento
se desconoce la respuesta a esta interrogante. Posiblemente, inducido
indirectamente por el mismo Castro. Tal vez, uniéndose a los gemelos
De la
Guardia que desde hace tiempo estaban en este negocio utilizando, principalmente
Panamá, México y Nicaragua. Tony De la Guardia era el jefe
de una sección
dentro del MININT conocida como MC (moneda convertible o en broma
conocida como moneda capitalista o marihuana y cocaína). Tampoco
se conoce
en realidad, la conexión del general Arnaldo Ochoa con este negocio.
Debemos
aclarar a los no familiarizados con las intimidades del gobierno cubano
que los
gemelos De la Guardia y el general Abrahantes tenían una relación
tan íntima con
Fidel como si fueran sus hijos. Abrahantes no sólo era el Ministro
del Interior,
sino al mismo tiempo jefe de la guardia personal de Castro y persona inseparable
del mismo. Desayunaban juntos y Abrahantes llevaba consigo los medicamentos
que Castro tomaba. Y de vez en cuando negaba a otros ministros o generales
acceso a Fidel para que el Comandante "no pasara un mal rato". Tony de
la
Guardia, permanecía en las habitaciones privadas de Fidel cuando
este se vestía o
bañaba. Este ayudante tenía el poder, en ocasiones, de tomar
decisiones a
nombre de Castro que este ratificaba rutinariamente.
Después de hablar con fuentes conocedoras creemos que una serie
de factores se
conjugaron para producir la crisis del 89. Una de mis fuentes dice que
el
narcotraficante colombiano Pablo Escolar se quejó al presidente
de Panamá Solís
Palma que los cubanos no estaban cumpliendo lo pactado con él, ya
que una
patrulla de guarda fronteras había interceptado un cargamento de
drogas en aguas
cubanas. Otro factor a considerar es que el embajador cubano en Panamá,
Miguel Brugueras, haya reportado lo que estaba sucediendo en el país
con las
operaciones de Tony De la Guardia, por si acaso, para que supieran que
estaba
haciendo su trabajo bien. El jefe del centro de inteligencia cubano en
Panamá,
Coronel Rolo, cuyo nombre verdadero es Homero Saker Shaffik, quien
reportaba al MININT por conductos normales era desconocedor de las
actividades de Tony De la Guardia y su departamento de MC (Moneda
Convertible). Al parecer el Coronel Rolo había tenido que tapar
un escándalo en
Panamá, ocasionado por el grupo de Tony de la Guardia cuando se
descubrió
que un cargamento de whiskey escocés Chivás Regal, que estos
vendían era
producido en la ciudad de Marianao con falsas etiquetas de la antes mencionada
marca. Este licor se vendió en muchos lugares de México y
otros países. Así
también como ropas con la etiqueta Calvin Klein. Rolo informó
a La Habana y al
embajador Brugueras, en Panamá, de las actividades De la Guardia.
Con tantas
personas en conocimiento de estas operaciones clandestinas no se pudo parar
el
inevitable escándalo.
¿Quién recibía los dineros de estos negocios? Estos
dineros eran recibidos por el
MININT con el conocimiento de su jefe Abrahantes. Como en todas las
burocracias hay chismes e intrigas, corrió el rumor entre miembros
del MININT,
que el general Abrahantes tenía dinero, en millones, depositado
en bancos
extranjeros, se menciona Panamá, Suiza e Inglaterra. Así
también existe el rumor,
todavía, que Abrahantes llevaba un diario y poseía documentos
secretos en algún
lugar de Europa.
Hay un personaje importante en este drama, que jugó un papel casi
desconocido,
pero clave: el coronel Marrero, conocido por el nombre en clave de Angelito
y el
apodo de Bombillo. Este es un poderoso militar de Seguridad del Estado
cuyo
trabajo consistía en vigilar o evitar el narcotráfico. Este
militar sobrevivió al
proceso. ¿Cómo se las arregló para desconocer oficialmente
lo que pasaba?
¿Cómo pudo sobrevivir el caso? Estas interrogantes no tienen
respuestas todavía.
Abrahantes, el único hombre que estaba autorizado para interrumpir
el sueño de
Fidel, en caso de una emergencia, terminó condenado a veinte años
de prisión.
¿Acusación?, ocultar la verdad de lo que sucedía a
Fidel. Abrahantes, dijo no
recordar nada respecto al caso y nada reveló. En una conversación
con un
compañero de prisión. Abrahantes comentó sarcásticamente
que, cuando el
teniente coronel Papito Fernández, de la inteligencia militar, lo
estaba
interrogando, éste le dijo: "Ministro si usted contesta mis preguntas
y coopera, la
Revolución lo tomará en cuenta y será generosa en
su sentencia". La respuesta de
Abrahantes, "venirme con esa historia a mí que fue quién
la inventó hace 30 años".
La encarcelación y muerte de Abrahantes fue un duro golpe personal
para Fidel y
Raúl Castro y una irrecuperable pérdida para los servicios
de inteligencia
cubanos. "Fidel, Raúl y Pepe formaban un trío formidable
y había gran afecto
entre ellos. Fidel y Raúl nunca se recuperarán del golpe",
nos comentó una
persona cercana a los antes mencionado. Muertos Abrahantes y De la Guardia,
bajó la moral del MININT. Su sucesor, general Abelardo Colomé
Ibarra, carece
de la inteligencia, educación, experiencia y refinamiento de Abrahantes
y ha
cometido grandes errores operativos en su trabajo. Colomé efectuó
una purga en
el MININT que decimó sus filas. Irónicamente, en la actualidad,
los más grandes
enemigos de Castro y su revolución son los antiguos miembros del
MININT. No
podemos cerrar esta parte de la historia sin decir que todos los amigos
de
Abrahantes, desde que este se encontraba exiliado en México, son
vistos con
desconfianza. Estos individuos conocidos como el "grupo de México",
están
marcados por su asociación con Abrahantes: Emilio Aragonés,
Pedro Miret, Elio
Leiva y el Gallego Franco.
El fusilamiento de los implicados en el caso de Ochoa no paró las
operaciones de
narcotráfico de Cuba. Curiosamente, despertó el apetito por
la obtención de
fáciles dólares en este comercio. Cuba siguió, aunque
más discretamente, envuelta
en este negocio. Los Estados Unidos, a mediados de la presente década,
llegaron
a un acuerdo informal y secreto con Cuba, en lo referente al narcotráfico.
Es
conocido que existe un intercambio de información y agentes entre
ambos países,
pero Cuba lo cumple a su forma.
La DEA (Oficina de Control de Drogas-Drug Enforcement Administration)
continúa suministrando información a Cuba de los narcotraficantes
colombianos,
Cuba a la vez tiene información propia sobre los mismos, pero permite
la entrada
de estos a la isla. En el noviembre del 1995 un cubano, Jorge Luis Cabrera,
alias
el Gordito, residente en los Estados Unidos, que viajaba frecuentemente
a Cuba
tuvo una reunión en La Habana con Carlos Tascón, uno de los
"capos" del cartel
de Cali. Dos meses después Cabrera fue arrestado en Miami, donde
le
confiscaron 6,000 libras de cocaína que introdujo en sus botes de
pesca por los
cayos de La Florida, también le encontraron una fotografía
con Fidel Castro.
Cabrera ofreció, a cambio de una reducción de su condena,
dar detalles de la
implicación del gobierno cubano en el tráfico de drogas.
La Procuradora General,
Janet Reno, declinó la oferta. También, Reno, no quiso nombrar
un fiscal especial
para que investigara las alegaciones de la complicidad del gobierno cubano
en el
narcotráfico a los Estados Unidos. En estos momentos Cabrera está
en la cárcel
cumpliendo 19 años de prisión.
Cuba, este año comenzó con un escándalo de narcotráfico
que envuelve a
Colombia, España, Panamá y posiblemente a México.
Investigadores federales
estadounidenses están preparando una investigación al respecto
donde tendrán
que testificar bajo juramento muchos altos funcionarios de diferentes agencias
federales. Muchas cosas entrelazadas saldrán a la superficie: el
narcotráfico
cubano y su conexión con la mafia rusa de Queens, New York. La aparente
reactivación de los centros de espionaje electrónico en Lourdes
y Bejucal. Y lo
conocido de los 10 espías cubanos apresados en Miami el pasado setiembre.