Hace días dijimos que el profesor hebreo-cubano de la Florida International University, José Manuel Keselman, de inclinaciones castristas, pues fue quien trató de exhibir allí el filme de propaganda comunista "Lucía", iría a juicio ante el severo juez Magginies por ofensas a la moral.
El pasado martes, Keselman se declaró culpable de haber intentado
seducir para alguna porquería a un policía de la ciudad,
de apellido Bacallao. El juez, muerto de risa, lo condenó a 50 pesos
de multa.