GERARDO REYES
El Nuevo Herald

Neyvy tiene 18 años. En la fotografía aparece sonriente y coqueta, frente a una nevera, una licuadora y cuatro panes de la cuota.

Al fondo se ven paredes verdes descascaradas y un ventanal grande que seguramente mira a una calle de La Habana Vieja, la ciudad que ella quiere compartir con un extranjero.

''Si viajas a mi país podemos ver la ciudad'', escribió Neyvy. ``Y espero que podamos compartir algunos momentos juntos''.

Lo de algunos momentos juntos puede entenderse un poco más si se abre otra fotografía en la que Neyvy está deliberadamente mal sentada en una silla de cuero con una falda de jean muy corta que no puede cubrir sus calzones.

Neyvy, cuyo nombre es una derivación fonética del US Navy, es la muchacha número W2571 de Havana Cuba Connection, un sitio de internet, operado desde Estados Unidos, que ofrece servicio de compañía y romances en Cuba de unas 300 mujeres de 18 a 42 años.

Algunas dicen que buscan una relación estable con un hombre extranjero, otras, en poses muchos más explícitas que la de Neyvy, incluso desnudas, sugieren que más que una agencia internacional de cupido este sitio es una forma de jineterismo cibernético.

De acuerdo con la base de datos pública de internet que contiene el registro de los administradores de sitios, havanacubaconnection.com, está administrada en Santa María, California por una persona de nombre y apellido hispanos.

El Nuevo Herald intentó comunicarse con el administrador del sitio en el teléfono que aparece en la base de datos, pero las llamadas no fueron respondidas.

''Nuestra página ha sido desarrollada para presentarle a usted la belleza de la mujer cubana para amistad, amor y matrimonio'', afirma la portada del sitio que ofrece traducción simultánea de su contenido al italiano, francés, alemán y portugués así como la temperatura y la hora en la isla.

En un errático inglés, idioma oficial de la página, los dueños del negocio sostienen que ``Hay unanimidad entre todos los que viajan a Cuba que las asombrosas mujeres de Cuba están dispuestas a complacer a sus hombres en cualquier gusto o deseo''.

El negocio del sitio en la red es simple: una vez escogida la mujer del voluminoso álbum virtual en el que aparece además de las fotos, el primer nombre, la profesión, la altura y el peso de la joven, el usuario paga $10 por el derecho a tener la dirección de la muchacha en Cuba.

Si el cliente no habla español, no importa, la muchacha buscará la forma de comunicarse, dicen ellos, y si todavía no entiende pues le suministran traductores.

Sexy, cariñosa, sin niños, festiva, honesta, romántica, fiel, complaciente, son las características que repiten con más frecuencia las mujeres, en una breve leyenda frente a sus fotografías.

La prostitución está prohibida en Cuba. Cualquier persona, incluidos extranjeros, que se dedique a ella o la promueva puede ser acusada penalmente. En los últimos diez años el gobierno de la isla, ante una recrudecimiento de la prostitución juvenil en las calles de La Habana, ha anunciado varias medidas.

En enero del año pasado se dieron a conocer disposiciones que castigan a los infractores con la pérdida del derecho a sus viviendas y tierras en aquellos lugares donde ``se practiquen actos de corrupción, prostitución, proxenetismo, trata de personas, pornografía, corrupción de menores, tráfico de personas u otros de similar connotación''.

En un esfuerzo por ganar el voto cubano de la Florida, el presidente George Bush incluyó en su tema de campaña las denuncias de que Cuba promueve el turismo sexual. El gobernante Fidel Castro dedicó parte de su discurso del 26 de julio a negar las acusaciones que calificó como producto de ``una mente calenturienta y fundamentalista''.

Si no es en el Malecón habanero, al menos en la esquina de Havana Cuba Connection del internet se percibe una mezcla de los mismos motivos que citan las mujeres, conocidas como jineteras, en la isla: dinero y deseos de salir del país.

Elvira, de 34 años y 117 libras, dice que está buscando ''un hombre que se case conmigo y me saque de este país, yo quiero vivir en Estados Unidos''. Ofrece la compañía de varias amigas hermosas.

En la sección de preguntas más frecuentes los operadores de la página sostienen que la razón por la cual las chicas quieren salir de Cuba es porque los hombres en la isla devengan un salario que no garantiza un nivel de vida ni tan siquiera por encima del promedio del tercer mundo.

''Un trabajador promedio en Cuba recibe $30 al mes. Sí al mes'', enfatizan los anónimos promotores de la página.

Lianet sin embargo es feliz, dice. La mulata de 5.8 de altura, asegura que le gusta reír mucho ``porque estoy contenta casi todo el tiempo''.

María de 23 años, posa con su torso desnudo en una casilla en la que informa que es sexy, le gusta bailar y hacer locuras. ''Ven y vuélvete loco conmigo'', dice.

Klyedis, estudiante de 20 años, que aparece quitándose sus jeans frente a una cama afirma que mira todos los días el buzón esperando la carta de un hombre que quiera una relación estable con ella. Lo mismo que quiere Niurvys.

Sabrina, de 22 años, escribe desnuda sobre una cama. Dice que tiene pasaporte y que es feliz y simpática. Y Maydelén, la número W2278, posiblemente la más atrevida, desnuda, con su cara de adolescente, apoyándose en la almohada de una cama simple asegura que es amistosa, que piensa en los demás y que busca una amistad íntima y sincera con alguien que la haga sentirla especial.

``¿Serás tú? Escríbeme pronto, la edad no importa''.

La reportera Sylvia Alvarado contribuyó a este artículo.