VIVIAN SEQUERA / AP
LA HABANA

El III Festival Internacional del Habano estará dedicado al aniversario del Cohiba,
afirmaron los organizadores.

El festival se realizará del 19 al 23 de febrero próximo, con la asistencia de unos
37 expositores de ocho países, entre ellos España, Italia, Francia y Suiza.

``El habano, para nosotros, lo consideramos un producto único en el mundo'',
dijo en conferencia de prensa Manuel García, el vicepresidente de Habanos S.A.,
empresa comercializadora de los famosos puros y que organiza el festival.

``Lo que ambos socios estamos buscando es mantener la calidad'', dijo por su
parte Jaime García Andrade, el español copresidente de la firma, que vende en el
mundo 34 distintas marcas de puros cubanos, desde los conocidos Cohiba y
Montecristo hasta mas recientes como Trinidad y San Cristóbal de La Habana.

La empresa Habanos S.A., creada en 1994 para impulsar la comercialización del
tabaco en rama, vendió en $500 millones el 50 por ciento de sus acciones al
consorcio Altadis, formado por la española Tabacalera y la francesa Seita, en
una operación realizada en 1999. La empresa ahora tiene dos copresidentes,
uno español y otro cubano, e igualmente dos vicepresidentes.

Según García Andrade aún no se dispone de las cifras definitivas para el año
pasado, pero estiman que la exportación de habanos fue de unos 117 a 120
millones de unidades, con ingresos por unos $200 millones.

En 1999, Cuba exportó 148 millones de tabacos. La caída, según ya habían
anticipado los propios ejecutivos de Habanos S.A, obedeció a una intensa
sequía que afectó al país en el primer semestre del 2000.

La sequía provocó un descenso de la humedad relativa en territorios como la
provincia occidental de Pinar del Río, entre las primera en la producción
tabacalera de Cuba. Debido a esa sequía, las hojas de tabaco debieron
permanecer por períodos más largos en las casas donde se dejan envejecer
antes de fabricar los renombrados puros. Ese mayor tiempo es requerido debido
a la fragilidad que causa la sequía en la hoja y que hace difícil manejarla a la
hora de fabricar a mano los tabacos.

La meta para este nuevo año, añadió García Andrade, es exportar unos 150
millones de unidades y lograr ingresos por unos 250 a 280 millones de dólares.

A pesar de las dificultades en el 2000 ``se cumplió el plan de producción y
exportación'', dijo García Andrade. La empresa también había anticipado que las
unidades en inventario cubrirían la demanda.

El tabaco se ha convertido en uno de los principales rubros generadores de
divisas para la isla, tras el turismo y el azúcar.