Radio Progreso, un controversial bloque de programas sobre Cuba
y la
política local, que se trasmite a través de WOCN-Unión
Radio (1450
AM), canceló esta semana los espacios En Alta Voz y Dominio
Público
debido a ``dificultades económicas''.
Desde el lunes pasado, Francisco Aruca, empresario y director
de la
programación, lamentó la reducción de horas
y dejó entrever que sería
por tiempo indefinido.
Pero, basado en su teoría de que ``el mundo de los negocios
es un
mundo muy discreto'', rehusó profundizar sobre las razones
que
obligaron su decisión.
Fuentes cercanas a Radio Progreso indicaron que la cancelación
de los
programas se debían a la interrupción de las operaciones
comerciales de
las compañías de vuelos fletados C&T Charters
y Wilson International,
que presiden John H. Cabañas y Daniel Blanco.
En marzo, la Casa Blanca autorizó la reanudación
de los vuelos directos
a Cuba, pero hasta el momento el Departamento del Tesoro no había
otorgado licencias a C&T Charters y Wilson International
para operar
vuelos directos, ni por terceros países.
``Creo que esta es la primera vez que salgo de una etapa de estas
transmisiones por razones de una temporal dificultad económica'',
dijo el
miércoles durante la despedida Alvaro Sánchez-Cifuentes,
director y
conductor de En Alta Voz. ``Desgraciadamente no se hicieron ciertas
las
acusaciones de algunos de estos acémilas que en las plantas
de radio
decían que uno cobraba de Cuba. Si cobrara de Cuba entonces
continuaría el programa''.
El bloque de Radio Progreso, creado por Aruca en 1991, es polémico
en Miami por su política editorial favorable al gobierno
de Fidel Castro,
por promover el levantamiento unilateral del embargo comercial
de
Estados Unidos a Cuba y por discrepar con las opiniones de las
víctimas
del régimen de La Habana.
``El bache puede ser más grande o menos grande pero no
será
indefinido'', dijo Sánchez-Cifuentes.
Después de un agradecimiento a la familia Vega, propietaria
de la
estación radial, el comentarista nacido en Cienfuegos
dedicó el resto del
programa a insultar ``en alta voz'' a periodistas cubanos que
laboran en
radio, televisión y prensa escrita.
Ernesto Ríos, reportero de Caracol WSUA 1260 AM, dijo que
la salida
de Sánchez-Cifuentes representaba ``un tracatán
menos de Fidel Castro
en este pueblo''.
``No obstante, lo siento por la publicidad que me hacía
atacándome'',
apuntó Ríos.
Radio Progreso también ha sido blanco de insultos, amenazas
y protestas
del sector más conservador del exilio. Esas presiones
y el mensaje
procastrista de su programación, han ahuyentado a los
anunciantes
privados.
Copyright © 1998 El Nuevo Herald