ELN: rechaza diálogo con gobierno de Uribe
El comando del ELN responde a una propuesta de establecer negociaciones
BOGOTA (EFE).- La guerrilla colombiana del Ejército de Liberación
Nacional (ELN) consideró como "difícil" establecer negociaciones
de paz con el gobierno del presidente Alvaro Uribe, por la "no existencia
real de una voluntad de paz".
El ELN respondió así una propuesta revelada horas antes
por el alto comisionado presidencial para la Paz, Luis Carlos Restrepo,
quien explicó que la administración de Uribe ofreció
el pasado 25 de junio a dicha guerrilla "una mesa de acercamiento en el
exterior" con el "acompañamiento de un garante internacional".
El comando del ELN, en un comunicado enviado a varios medios de comunicación, criticó al mandatario por afirmar que en el país no hay conflicto armado y por celebrar negociaciones con el grupo para militar de derecha Autodefensas Unidas de Colombia (AUC).
"La negación del conflicto interno, la favorabilidad con los paramilitares y la negativa actitud para solucionar la crisis humanitaria evidencian ante el país y el mundo la no existencia real de una voluntad de paz", expresó el movimiento insurgente.
El ELN indicó que "tener una real voluntad de paz implica estar siempre del lado de los desprotegidos". Acusó al Ejecutivo de dar prioridad a leyes "que favorezcan a los victimarios" como la aprobada el mes pasado para reinsertar a los paramilitares, y de "negligencia extrema para no solucionar el drama de millones de desplazados".
"Resolver los interrogantes que hagan viable un proceso de paz no está en nuestras manos, pues para nosotros la paz no es la desmovilización y el desarme de la insurgencia, sino que ella se sustenta en la superación de las causas que nos llevaron a la guerra", añadió. La semana pasada el senador Carlos Moreno de Caro, partidario del presidente Uribe, dijo que el Gobierno de Colombia gestionaba acercamientos con el ELN con la participación del ex presidente del Gobierno español Felipe González.
El Gobierno mantuvo diálogos con delegados del ELN en Cuba hasta abril de 2003 y los restableció hace un año con el apoyo de México, pero el grupo rebelde los desestimó en abril pasado. El Gobierno acusó entonces al ELN de "arrogancia" y de evadir el diálogo por no estar dispuesto a abandonar el secuestro como fuente financiera de sus actividades.
El alto comisionado para la Paz señaló que el Gobierno está dispuesto a suspender las acciones militares contra el ELN y a tener en funcionamiento la mesa de diálogos "por un tiempo breve y definido" para definir "el cese de hostilidades".