Reuters
PANAMA

La fiscalia auxiliar panameña dejó el jueves en libertad al cubano-americano
César Matamoros, uno de los presuntos detenidos que planeaban atentar contra
la vida del gobernante Fidel Castro, en la X Cumbre Iberoamericana.

Matamoros fue beneficiado con una medida cautelar de casa por cárcel, debido
a que las investigaciones no han determinado que tuviera una vinculación directa
con los explosivos plásticos que se usarían en el atentado, dijo una fuente
cercana a las pesquisas.

Matamoros negó el jueves en la noche a un canal de TV local tener vínculos con
los planes para asesinar a Castro, al explicar que se relacionó con los otros
detenidos por una petición que le hicieron "amigos del exilio cubano'' residentes
en Miami.

Matamoros, quien reside hace 14 años en Panamá, precisó que sus amigos le
solicitaron "ayudar a unos paisanos que venían a Panamá a conocer y pasear'',
por lo que puso a uno de sus empleados como chofer de los visitantes, entre
quienes destaca Luis Posada Carriles, señalado por Castro como "el más
peligroso terrorista del hemisferio''.

Tras la liberación, estudiantes universitarios protestaron frente a la Fiscalía
Auxiliar.