'Paras' siembran bases en Medellín
ISABEL SANCHEZ / AFP
MEDELLIN, Colombia
Con los rostros cubiertos con pasamontañas y fuertemente
armados, paramilitares de ultraderecha imponen su presencia en barrios
marginales de
Medellín, la segunda ciudad de Colombia, donde libran
cruentos enfrentamientos con la guerrilla por el control territorial.
Se hacen llamar miembros del Bloque Cacique Nutibara, un grupo
integrante de las paramilitares Autodefensas Unidas de Colombia (AUC),
que llegó a la
ciudad a principios de año para enfrentar a las milicias
urbanas de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y del
Ejército de Liberación
Nacional (ELN), que históricamente habían controlado
las barriadas periféricas.
''Bienvenidas Autodefensas a nuestro barrio. Con su presencia
volvió la paz, la tranquilidad y la seguridad. Gracias'', se lee
en un cartel escrito a trazos
ligeros por vecinos del barrio San Javier, en el noroeste de
Medellín, 430 km al noroeste de Bogotá.
Una mujer y dos hombres lo colocaron, con esmero, en la pared
de un viejo edificio de la localidad: ''AUC somos todos'', agrega, en tinta
roja, un graffiti,
bajo el letrero.
''Hemos recuperado mucho territorio. Estamos tan fuerte que hemos
recuperado varios barrios de Medellín'', aseguró el comandante
político del Bloque
Cacique Nutibara, que prefirió no identificarse.
Según el paramilitar, sólo el pasado domingo el
bloque dio de baja a 12 milicianos en el noroeste de Medellín y,
desde que empezó a operar en la zona, a
entre 60 y 70 rebeldes, principalmente del ELN.
''Estamos aquí haciendo Estado donde el Estado no está'',
añadió, al precisar que los barrios San Javier, El Salao
y Corazón de Jesús, en la zona noroeste
de la ciudad, están totalmente controlados por los paramilitares.
Medellín, la capital del departamento de Antioquia, fue
durante la década de los años 80 escenario de la guerra librada
por los narcotraficantes de Pablo
Escobar, y en la actualidad lo es de los combates de las milicias
urbanas de la guerrilla izquierdista y los paramilitares.
La ciudad, con más de dos millones de habitantes, dio
su nombre al poderoso ysanguinario cartel cocainero que hace 20 años
controló la mayor parte del
tráfico de esa droga hacia Estados Unidos.
Medellín tiene en sus alrededores la segunda concentración
industrial del país, mientras las exportaciones de café y
banano de Antioquia abonaron
durante varias décadas el crecimiento de la economía
colombiana.
En Antioquia ''se concentra entre el 35 y el 40 por ciento del
accionar armado del país, representado en los grupos guerrilleros
izquierdistas y los
paramilitares de extrema derecha'', admitió recientemente
el gobernador encargado del departamento, Eugenio Soto, quien reemplaza
al titular, Guillermo
Gaviria, secuestrado en abril por las FARC.
El pasado 21 de mayo, nueve personas, entre ellas seis menores
de edad, murieron y 33 resultaron heridas en un sector marginal del centro-oeste
de
Medellín, cuando unos mil efectivos del Ejército,
la Policía, el servicio secreto y la Fiscalía irrumpieron
en busca de guerrilleros urbanos, desatándose
intensos combates.