Ordenan a los comercios permanecer cerrados

 EFE
 BUENOS AIRES

 El primer censo nacional del siglo XXI, que por primera vez incluye preguntas para cuantificar la población indígena de Argentina, se inicia hoy en medio de una viva
 polémica por el daño económico que causará a algunos sectores.

 La realización del noveno operativo en este país para recoger los datos de población, vivienda y educación se postergó en dos ocasiones y estuvo a punto de ser
 pospuesto otra vez debido a la negativa de los maestros a participar por un conflicto laboral.

 Pero la polémica más fuerte se ha desatado a raíz de que el censo no sólo demandará ocho horas durante el día de hoy, sino otras cinco del domingo, que fue declarado festivo por el Gobierno y durante el cual deberán permanecer cerrados los comercios de venta de alimentos y bebidas, los cines y teatros, y tampoco podrán realizarse actividades con asistencia de público.

 Mientras las autoridades sostienen que aplicarán multas a quienes incumplan las normas, las agrupaciones de comerciantes advierten que a la profunda recesión
 económica que vive el país el sector deberá añadir el perjuicio que significa no abrir sus puertas durante todo un fin de semana.

 No obstante, la provincia de Buenos Aires, que es la más rica y poblada del país, ha decidido enfrentar la decisión del Gobierno y autorizó la actividad comercial en el distrito durante el censo.

 El gobernador bonaerense, Carlos Ruckauf, dijo ayer que si el presidente Fernando de la Rúa ``puede evitar ser censado'' por encontrarse de visita oficial en Portugal, "no hay motivo para que un ciudadano no pueda tener abierto su comercio ese día''.

 La discusión se cerró con un acuerdo que permitirá a los habitantes de la provincia concurrir a sus empleos una vez que hayan sido censados.

 Los problemas para el censo ya habían comenzado el año pasado, cuando su realización debió ser postergada por dificultades presupuestarias.

 De ese modo, Argentina no cumplió con la recomendación de la ONU de realizar un censo por década en años terminados en cero.

 Dentro de las 70 preguntas que deberán responder los argentinos, figuran por primera vez consultas referidas a la existencia de personas descendientes o pertenecientes a un pueblo indígena y sobre personas con alguna discapacidad.
 

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